Más días comenzaban a pasar, y aún toda la familia de amigos seguían en pie con el caso de Roseanne.
Y para qué mentir, realmente no sabían nada de Rosé, tomaron su caso con las autoridades, pero estas parecían no tomarle mucha importancia, decididos a una mejor opción, ellos harían lo que sea para encontrarla. Realmente era agobiante la situación, el señor Jung llegó algunos días después de la recuperación de Jimin.
Estaba haciendo todo lo posible por conseguir siquiera un poco de información de la menor de los Jung, hasta que, un día como cualquiera, el sonido del teléfono irrumpe con fuerza hasta los rincones de la casa, el primero en contestar fue Hoseok, grande fue su sorpresa cuando escuchó desde la otra línea, la dulce y delicada voz de su hermana.
Era Rosé, de nuevo.
Hoseok sin poder creerlo llamo a gritos a todos en esa estancia, apareciendo como si de un fantasma de tratara. Hobi le pasó el teléfono a su padre con urgencia cuando este le rogó con la mirada que quería escucharla, ahora Rosé parecía la pasmada cuando escuchó después de años a su preciado padre, tanto que no pude evitar llorar con las ganas de estar ahí de nuevo con toda su familia reunida. Y antes de que cortara sin ningún inconveniente como la última vez, Jimin pudo volver a hablar con ella.
Fueron solo segundos, pero el juro que fueron los mejores desde que entró en aquel estado. Nada podía ser mejor. Su prometida, su futura esposa, el amor de su vida y por la que anhelaba volver a ver estaba hablándole, por fin volvía escuchar su dulce voz y lo bien que se deleitaba de ella pese a que solo era una llamada mientras ella estaba quien sabe dónde.
Después de aquello, ella les aseguro con el alma que estaba bien, que no se preocuparan por ella y que pronto estaría ahí de vuelta con toda su familia. Y por más que pareciese falso y ellos no le creyeran, confiaron en ella. Quizás la sinceridad con la que se los aseguro hizo que confiaran en ella por más agobiante que fuera.
Un día ha pasado después de eso, y aunque Rosé les dijo que no debían preocuparse por su situación, ellos estaban al pendiente de todo. Y sorprendentemente, en ese mismo día después de algunas horas un par de visitarás que no creían que verían en ese entonces estaban ahí varadas en aquel gran salón de entrada, buscando con la mirada a los residentes.
Hoseok apareció caminando por el mismo lugar de ella, y cuando las percibió sonrió entusiasmado.
– Hey chicas, están aquí – saludo sin más, como cuando veía a un conocido por la calle y de paso se saludaban con un simple gesto – Oh por Dios, ¡Chicas están aquí! – su expresión se crispo en una de completa sorpresa al darse cuenta de quien en realidad se trataban.
El mayor de los Jung corrió hacia las tres chicas que reían igual de entusiasmadas que el a recibir aquel abrazo que les dedicó a cada una sin borrar una sola pizca de su sorpresa y felicidad.
ESTÁS LEYENDO
𝐅𝐀𝐍𝐂𝐘 𝐘𝐎𝐔 | r.k
Fanfic𝐅.𝐘 | "- 𝙉𝙤 𝙚𝙨 𝙘𝙖𝙨𝙪𝙖𝙡𝙞𝙙𝙖𝙙 𝙦𝙪𝙚 𝙝𝙖𝙮𝙖𝙨 𝙫𝙪𝙚𝙡𝙩𝙤 𝙖 𝙢𝙞, 𝙘𝙖𝙧𝙞𝙣̃𝙤. 𝙇𝙤𝙨 𝙙𝙤𝙨 𝙨𝙖𝙗𝙞𝙖𝙢𝙤𝙨 𝙦𝙪𝙚 𝙨𝙞𝙚𝙢𝙥𝙧𝙚 𝙚𝙨𝙩𝙪𝙫𝙞𝙢𝙤𝙨 𝙙𝙚𝙨𝙩𝙞𝙣𝙖𝙙𝙤𝙨 𝙖 𝙚𝙨𝙩𝙖𝙧 𝙟𝙪𝙣𝙩𝙤𝙨" Y Roseanne nunca se esperó qu...