Celos y Licor ﹝𝘞𝘢𝘯𝘨𝘟𝘪𝘢𝘯 & 𝘞𝘦𝘯𝘡𝘩𝘰𝘶﹞

Coming...

Ambos jóvenes caminaban con tranquilidad por el bosque, había decidió salir por algo de leña después de que está se acabará dejando a medias su preciada cena. El más alto se la pasaba haciendo un par de bromas y como de costumbre haciendo halagos al mayor, quien solo rodaba los ojos y decía cosas como "Deja de aludir Lao Wen".

-Ah cierto, A-Xu- el joven de tunicas rojas saco de las mismas un dije de jade bastante hermoso -A-Xian me ha enviado esto ¿No es hermoso?- lo balanceo un poco frente a sus ojos

Sabía lo que hacía, por algo lo había traído con el incluso cuando el regalo había llegado por la mañana, rio en su interior al ver una pequeña molestia en sus ojos, apartó el objeto y lo tomo entre sus manos, observándolo como si fuera la cosas más preciada del mundo.

-Ahh...A-Xian hace unos regalos impresionantes- una media sonrisa se presentó cuando el mayor adelanto sus pasos

Y quería seguir jugando con el, quería seguir tentando a su pareja pero a tan solo dos pasos de jalar de las tunicas de el sintió un peso enorme caer en su mano.

Siseo cuando su mano cayó al suelo como si fuera una enorme piedra, Zi Shu escucho el siseo y dió media vuelta pero tampoco tuvo oportunidad de acercarse cuando en un segundo se vio rodeado de una docena de hombres vestidos de negro con afiladas espadas.

-¿Que es lo que quieren?- su voz fuerte y firme salió aún cuando se sentía un poco ansioso al ver a Wen Ke Xing con muecas de dolor aún arrodillado en el suelo

-El joven Wen debe de ir con nosotros- uno de ellos hablo, envainando su espada y acercándose al mencionado, no tuvo oportunidad cuando a los segundos tenía el filo de una fina espada sobre su cuello

-El no va a ningún lado- aunque solía mantener la calma en las situaciones difíciles había encontrado una nueva debilidad con A-Xing y no permitiría negociación en sus palabras

El hombre rio bajo el pañuelo que tapaba la mitad de su rostro, el joven Zi Shu se familiarizaba un poco con la forma de ataque y vestimenta pero sus espadas eran mucho más largas y pesadas de las que el solía utilizar, así que podía descartar que aquellos fueran sirvientes del emperador.

-No creo que puedas asegurar tus palabras- aunque sus manos estaban a la vista, levantadas a los costados no tomo mucho tiempo para sacar un pequeño cuchillo y en un hábil movimiento invertir la posición -no podemos decepcionar a nuestro amo- y ciertamente sus ojos eran lo único a descubierto, pero Zi Shu podía ver la sonrisa a través de ellos.

-A-Xu... déjalo- el menor con mucho esfuerzo se levantó y pidió con una voz seca, Zi Shu vio la palidez en su piel y en su interior entro en pánico al ver su mano con marcas negras.

Sus labios no llegaron a pronunciar otra palabra cuando sintió el vacío en su cuerpo y su vista volverse oscura, cayendo al suelo de manera repentina

-A-XING!- el simple movimiento de correr a él le formó una leve cortada en su cuello, el tipo de negro no le había impedido ir -¿Que fue lo que hicieron?- su mirada ya no tenía reciduos de paciencia o amabilidad, tomo por los hombros al menor y sin desperdiciar tiempo recupero la postura, amenazándolo aún con la espada que solía aguardar

-Estara bien si lo llevamos con nuestro amo, pero es cuestión de tiempo, tu decides si quieres que siga con vida o muera en tus brazos- el hombre no se inmutó con su acción, ni siquiera tomando la empuñadura de su espada, pero todos sus demás hombres seguían en posición, listos para atacar cuando se les ordenará.

Zi Shu vaciló, no entendí cuáles serían sus motivos para mentir así que su inconsciente quería creerle, a demás si lo que decía verdad perdería a su pareja y se podría arrepentir de ello toda la vida, demasiada conmoción que terminó aceptando.

-Si el muere, no tendrás oportunidad de sobrevivir- hablo de manera seca, aquello fue la señal para que dos hombres se acercarán y tomarán a Wen Ke Xing, sin más resistencia del otro.

Y así, en una nube de humo, desaparecieron en cuestión de segundos.

No sabía que tan buena fue su decisión, tendría que utilizar hasta su último recurso para saber quién eran aquellos hombres y que buscaban en Lao Wen, suspiro y dejó caer la espada que sostenía en su mano. Está misma hiso un sonido al caer, el joven Zhou se inclinó y debajo de la espada, justo en el lugar donde Ke Xing había caído abruptamente al suelo.

El collar de jade había caído de sus manos y no había tenido oportunidad de recogerlo.

Lo tomo y entendió aquello como su única ayuda, ahora más que nunca los necesitaría.

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Al fin me animé a hacer segunda parte, después de pensarlo mucho y darme un tiempo para ordenar mis idea les traigo la segunda parte de "Celos y Licor".
Quisiera agradecerle a la personita que me hiso pensar en esta posibilidad que ahora mismo se convierte en una meta más, espero tenga el mismo apoyo que la primera (razón también por la que continuo la historia aquí mismo y no en otro apartado). Sin más, la próxima semana comenzarán los capítulos!

Celos y Licor: Breakdown

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