Yo no soy Zenith!

Cap6: Ayuda

—Me parece perfecto. Esta es la última pregunta —Lo miro a los ojos—. ¿Me creerías si te digo que no soy Zenith? al menos no la verdadera.

—¿Qué estas tratando de decir? —dijo con un nudo en la garganta.

—Lo que escuchaste. Aunque su físico siga aquí, su alma o conciencia, llámalo como quieras, ya no está. Claro aunque se quedaron algunas cosas, por eso puedo hablar y leer su idioma.

"Esto es imposible" —Kiel no sabía que pensar o decir, estaba procesando lo que le acababan de decir. Soltó una carcajada.

—Disculpa, ¿te estas burlando? —dijo Zenith enfadada— esto es algo serio.

—¿Qué especie de broma es esta? —respondió Kiel—. Acabo de llegar, y me sorprendes con algo así. Déjame decirte que casi me la creo.

"¿Cómo es posible que te tomes esto como una broma?" —Zenith levanto su mano a punto de darle una bofetada, en el rostro, debido a rabia que tenía, pero antes de hacer tal acto se contuvo para luego derrumbarse de rodillas enfrente de Kiel.

—Zenith... —Kiel trato de levantarla del suelo pero ella golpeo su mano evitando su ayuda.

—¿Por qué eres así? —dijo a punto de llorar—. Ahora entiendo por qué Zenith buscaba una familia en que acogerse. ¿Sabes lo que se siente estar solo en un lugar el cual no conoces? ¿Sabes el miedo que tengo ahora? Pensé que podrías ayudarme pero veo que no te interesa Zenith ni como una hermana. Eres un mentiroso.

—yo... de verdad... es difícil de creer —tartamudeaba Kiel—. No sé qué decir ni que hacer. Lo siento.

El silencio duro un corto tiempo que parecía nunca acabar. Kiel le dio su mano a Zenith para ayudarla a levantar, la cual esta vez sí acepto. Se limpió sus lágrimas, con el pañuelo que le dio Kiel. Una vez hecho las paces, pudieron hablar con más tranquilidad.

—Si tu estas aquí ¿Dónde está Zenith? Y ¿Cuál es tu nombre? —dijo Kiel.

—Supongo que eres consciente de que en este mundo existe la magia, por eso tengo una teoría, lo más probable es que hayamos cambiado de cuerpos. No creo haber muerto, tenía buena salud y dudo mucho que haya comido algo malo. Y sobre mi nombre, no necesitas saberlo, después de todo pienso irme una vez arreglado algunas cosas. Claro a menos que te incomode llamarme Zenith.

—Está bien, se podría levantar malos rumores si no te llamo por "tu" nombre; pero a que te referías cuando hablabas de haber muerto.

—No importa. Necesito tu ayuda en algunas cosas —dijo cambiando el rumbo de la conversación—. Pronto será el debut y necesito aprender a bailar y aun compañero, también necesito que me enseñes algunas cosas de este mundo, después de todo te graduaste de Arlanta a muy temprana edad.

—Te ayudare pero tienes que prometer que Zenith volverá.

—No hay necesidad de que desconfíes en mí, te prometo que volverá. Eso es todo, buenas noches.

Se fue hacia su habitación, dejando la lámpara y a Kiel, pensando, en el balcón.

"Siempre me decían que llorando nunca conseguiría nada, bueno parece que no es del todo cierto"