Capitulo 14.

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Narra Paula.

Salgo de mi habitación después de ducharme con el pijama, me dirijo hacia la cocina y desayuno. Vuelvo a mi habitación y abro el armario. Cojo una falda blanca, una camiseta negra ajustada con la espalda al descubierto y unos tacones. Me lo pongo todo, cepillo mi pelo, me pongo un collar plateado y me pinto un poco. Mi movil pita y lo cojo. Un mensaje de Juan.

Estoy en 5 minutos en tu casa. Hoy no quiero ver lágrimas, quiero ver sonrisas.

Sonrío, cojo mi mochila y bajo al salón a esperar a Juan.

***

-No voy a poder, Juan, voy a llorar si los veo juntos.

-No lo vas a hacer. - salió del coche - agarrate a mi brazo lo fuerte que quieras para no llorar.

Salí detrás de el y me agarré de su brazo. El me sonrió y avanzamos. Casi todo el mundo nos miraban, bueno, me miraban. Creo que mucho de ellos pensaban que me quedaría en casa llorando, pero no, no voy a gastar lágrimas en chicos. Aunque ya lo haya hecho... pero ninguna más.

Llegamos a las taquillas, y él va a la suya y yo a la mía. La cierro y me doy la vuelta para ir a mi primera clase pero me detengo. Puta, puta, puta... ahí estaban besándose como si no hubiera nadie. Mi ojos ardían. Tenía tantas ganas de ir hasta allí y darle una patada en sus partes a Adrián y un puñetazo a Andrea. Pero las ganas de llorar me detuvieron. Fui con paso rápido al baño mas cercano y entré. Tiré la cartera al suelo, me senté en el suelo y escondí mi cabeza entre las rodillas. ¿No decías que no ibas a derramar ni una lágrima mas? Joder. Y ella diciendome que no había sido su intención y los encuentro besándose. Otra vez la misma sensación.

La puerta del baño se abre, levanto la cabeza y veo a una chica alta, con un pelo marrón por debajo de los hombros, guapa, con unos shorts negros y una camiseta azul claro ajustada. Ella se acerca a mi y se sienta a mi lado.

-Oye... ¿qué te pasa?

Negué con la cabeza, pasé mis dedos por debajo de mis ojos para apartar las lágrimas y me levanto.

-Me llamo Carla.

-Paula.

-¿Y estás bien? - se acercó a la puerta y agarró el pomo.

-No, para que mentirte.

-¿Me vas a contar que te pasa? - se acercó a mi - puedo ayudarte.

Suspiro y me siento otra vez en el suelo. Ella se sienta en frente mío y apoya la cabeza en sus manos.

-¿Y las clases que? - pregunté para quitarmela de encima.

-Ya empezaron hace tiempo. Cuenta.

-A ver, me gusta un chico, y ese chico está con mi mejor amiga. Punto.

Me miró pensativa.

-¿Y has hablado con ellos?

-Con ella el sábado. Pero como te imaginas, no lo arreglamos. Con él no, ni tengo intención de hablarle.

-Eso es lo mejor, pero tienes que hablar con él y aclarar la cosas y después, intentar alejarte de ellos. Y deberías desamorarte de él. Ya se que no es fácil, pero no imposible. - se levantó y cogió su mochila del suelo - y si quieres te puedo acompañar para hablar con él.

-Claro. ¿En el primer patio aquí? - me levanté y también cogí mi mochila.

-Si. Y recuerda lo que te voy a decir - abrió la puerta - nunca derrames una lágrima por un chico que no merece la pena.

***

El timbre suena, ahora toca patio. La primera vez en mi vida que no quería que tocara. Recojo mis cosas, las guardo y salgo de clase dirigiendome al baño. En la puerta está Carla hablando con otra chica. Me ve y me sonríe, se despide de su amiga y viene hacia mi.

-¿Preparada? - me coge de la mano.

Niego con la cabeza.

-Lo suponía.

Vamos hacia la cafetería, nos tomamos un café cada una, una napolitana yo y ella un donut. En este rato me sugiere cosas que debería decirle. Esta chica me ha caído genial. Pensamos igual. Tenemos el mismo carácter. Nos gustan muchas cosas a las dos. ¿Es mi hermana perdida, y a mi hermano lo adoptaron para tapar su presencia? Ojala.

-¿Preparada para el plan?

Asiento y me levanto. Paso por enfrente de la mesa de Adrián y salgo de la cafetería. Me dirijo al baño de las chicas y me quedo en la puerta. Unos minutos después veo a Carla y a Adrián acercándose. Cuando él se da cuenta de lo que va esto intenta irse, pero Carla se lo impide.

-¿Para que me has traido, Carla?

-Tenéis que hablar - me da un beso en la mejilla y se va - os dejo solos.

-¡¿Qué!? ¡Carla! - grito histerica.

-Tiene razón, tenemos que hablar.

Lo miro extrañada. Ya no va con esa sonrisa que me derrite ni con ese brillo tan peculiar, ahora está más como ... ¿preocupado? ¿deprimido? Inspiro todo el aire que puedo y lo expulso despacio. Vamos, tú puedes.

-S-solo quería preguntarte una cosa. - estoy muy nerviosa, por eso tartamudeo.

-¿El qué?

Inspiro profundamente y expulso el aire con rapidez esta vez, aprieto los puños y le miro.

'Sueltaselo todo, nena,' las palabras de Carla en el patio.

-¿Por que? ¿Por qué me besastes a mi y luego a ella? ¿Por que has estado todo este tiempo jugando conmigo, a la vez que con ella? ¿Por qué en la fiesta bailastes conmigo? ¿Por que me has jodido tanto? ¿Por qué cuando tiré la copa te acercastes y me cojistes de la mano? ¡¿Por qué, joder, por que?!

Se quedó mirandome, apretando los dientes. Es que no entendía por que había jugado conmigo durante este tiempo, y quería saber el por qué. Lo necesitaba.

No decía nada. Estaba ahí parado, con los puños y los dientes apretados y mirandome fijamente.

-¿Me piensas responder? - me estaba extrenado. ¡Contesta joder!

Adrián abrió la boca para contestarme, pero el ruido de la campana le interrumpió. Suspiró y se acercó a mi, pero le aparté poniéndole la mano en el pecho. Resopló y se apartó.

-Hasta otra.

-Lo dudo. - dí media vuelta y fui a mi siguiente clase aun nerviosa y con angustia. Yo le había soltado todo, y el no había respondido ni a una pregunta.

Pero aunque el me ha hecho tanto daño, le quiero mucho.

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Siento no haber podido subir ayer, pero tenía un examen. Espero que os guste, bessooos.

@saralboranista7

Entre el amor y la amistadDonde viven las historias. Descúbrelo ahora