Como un drama coreano. |PPG&RRB|

15. Una visita amistosa

Nota autora original: Vaya, cuatro reseñas en los primeros quince minutos. ¡Ustedes son rápidos! Me inspiré en tu rapidez y decidí publicar de esta manera antes de lo previsto :)

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Blossom se sintió decepcionada al descubrir que el chico del tejado no estaba en detención hoy, pero se animó cuando vio que Brick no la estaba esperando como esperaba. Tal vez cambió de opinión y se llevó el pez a su casa, no es que ir a su casa fuera mucho mejor.

Cuando Blossom abrió la puerta de su casa, se sorprendió al encontrar a Brick sentado en su sala de estar hablando con su padre.

—¿Qué estás haciendo aquí?—Preguntó Blossom, pisando fuerte hacia su padre sentado con su archienemigo. —¿Por qué no esperaste a que saliera de detención?

Brick sonrió, sintiéndose cómodo en el sofá de su familia. —Estaba disfrutando de la compañía de tu interesante padre.

—Blossom, qué encantador compañero de clase tienes, tan inteligente y considerado. Incluso trajo esta hermosa caja de chocolates finos.

—En realidad no fue nada.

El profesor se volvió hacia su hija, —Blossom, ¿por qué no me ayudas a llenar el vaso de nuestro invitado?

Era el vaso más bonito que tenían y Blossom odiaba que bebieran de él.

—No es un invitado, padre. Sólo está aquí para trabajar juntos en nuestro proyecto.— Dijo Blossom mientras caminaban hacia la cocina.

Cuando estuvieron lo suficientemente lejos de Brick, el profesor se volvió hacia Blossom con expresión seria. —Ahora, Blossom, si hay algo entre ustedes dos...-

—Papá, créeme, nada...-

El padre de Blossom levantó una mano para silenciarla.

—Quiero que sepas que tienes toda mi bendición.

Blossom casi colapsa por la conmoción. Esto viene de la chica que tiene un ataque al corazón con la mera mención de la palabra novio. Pasó un tiempo antes de que Blossom pudiera formular palabras. —No hay ahora o alguna vez habrá algo entre nosotros.

El adulto en la habitación caminó lentamente hacia el refrigerador, hablando mientras avanzaba. —Ahora sé que las adolescentes no suelen optar por los chicos más inteligentes, pero él podría ser bueno para ti.

Blossom suspiró. ¿Qué había hecho exactamente Brick para que le agradara tanto a su padre? —Papá, realmente no quiero hablar de chicos.

—Está bien, puedo captar una indirecta.— Le entregó a Blossom el vaso de agua. —Aquí, llévale esto. Les daré un poco de espacio.

Blossom tomó el vaso y decidió no discutir con su padre. Al parecer, todos los adultos de su vida se habían vuelto locos. Primero los maestros no le creían acerca de sus sillas, luego tuvo que trabajar en un proyecto con Brick, y ahora su papá está prácticamente listo para arreglarla para que se case con Brick.

—Terminemos con esto—murmuró Blossom, volviendo a Brick.

Brick no estaba del todo listo para incorporarse al trabajo escolar. Se quedó mirando los dos peces Beta en la mesa de café. —¿De qué hablaron tú y tu padre en la cocina? Me cuesta creer que realmente necesitara tu ayuda para conseguirme un poco de agua.

Blossom ignoró el rosa que subió a sus mejillas. —¿Y tú y mi papá? Él no parece odiarte y no puedo entender por qué.

Brick miró a Blossom, prefiriendo mantenerla en la oscuridad. Notó sus mejillas rojas. Sonrojarse, solía asociarlo con la debilidad, era algo que las chicas tontas hacían todo el tiempo cuando coqueteaban y eso le molestaba, pero en ella era… lindo. Espera, no, fue extraño. Sí, raro, no lindo. “Ella es un poco linda” La voz de Boomer flotaba en su cabeza.