𝐂𝐁| 𝐉𝐞𝐟𝐞 𝐂𝐫𝐮𝐞𝐥
❝ Su crueldad es su esencia cautivante ❞
━ Señor, necesito un aumento.
- Jungkook lo miró esperanzado, con el corazón acelerado y con el desespero de recibir una afirmación.
El hombre que estaba de espaldas hacía él, no hiz...
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❝ De mal en peor ❞
Maldición, iba a llegar tarde a su reunión, nisiquiera pudo vestir algo formal y su cabello está hecho un asco. "Jeon Jungkook, ¿cuando será el día en que harás las cosas bien sin morir en el intento?" Y dice morir porque por estar con apuros casi lo lleva una bicicleta por delante. El transporte publico tampoco le ayuda, y ni hablar de las personas que no colaboran en apartarse de su camino.
No había dormido nada bien, toda su madrugada se la dedicó a los bocetos rediseñados que su jefe le había mandando a volver a hacer, ¡Era bastante agotador! También estuvo dándole algunos detalles a su maqueta basada en su aula de clases a su perspectiva. Le había dado los detalles que él querría ver en aquella escuálida habitación que no demostraba ser de artistas. Así que él había dado su buen aporte en ella. Aunque era en grupo, aún así él la realizó solo para ahorrarse irresponsabilidades.
Sus manos estaban ocupadas, llena de carpetas con los bocetos nuevos y en su bolso la maqueta que debía entregar esta tarde.
Su día se dividía en dos. Las mañanas se lo dedicaba a su trabajo, de seis de la mañana a doce del media día. Él era el encargado de los bocetos, aunque su jefe nunca consideraba alguno de ellos, Jungkook siempre trataba de darle una buena idea y aportar un poco en las siguientes pasarelas, estas si las tomaban en cuenta, ya porque él era el decorador.
Jungkook iba con la esperanza de que sus diseños; diseñados de nuevo, fueran aceptados esta vez para ser la próxima línea de la colección de verano "Laughing august", tenia muchas ideas y una paleta de colores en tonos brillantes y alegres.
Volviendo al tema. Sus tardes se resumía en ir a la universidad de dos de la tarde a seis de la noche. Sus noches se las dedicaba a terminar trabajos para el otro día, esa rutina día a día.
La madrugada de hace horas no fue la excepción.
Cuando Jungkook pudo al fin esquivar a cada persona y llegar al autobús, encontró asiento y sin pensarlo se sentó en el. El cansancio aún era intacto, sus ojos se sentían igual de pesados, y cuando pensaba cerrar un ojo, en el autobús ingresa una joven embarazada. No habían puestos, y tampoco se veía que alguno iba a brindarle el suyo. Y aunque si habían asientos exclusivos solo para embarazadas, estos estaban llenos con tres de ellas. Y a Jungkook no le tocó más que suspirar y brindarle su puesto a la joven. Le sonrió un poco y la mujer se inclinó en agradecimiento.
Al estar parado y con una de sus manos tomando el barandal de arriba, observó a la joven mujer que tenía en su vientre un pequeño que deseaba con devoción. Se veía bastante grande, ¿Le pesará? ¿Por qué la dejaban salir sola? Él nunca dejaría que Sun-Hee saliera...así.
Y fue en ese instante donde cayó en cuenta de su actual situación. Su novia estaba embarazada, ella estaría en algunos meses igual que esa joven y él..él tendrá que esforzarse más en su trabajo para mantener al pequeño en camino.
