Una apue$ta y 7 orgasmos • [Tú x BTS] [TERMINADA]

•08•

•He is not good•

Todo con lo del voluntariado iba a la perfección, tenía más cercanía con Jin, podíamos hablar de cualquier cosa, lo podía analizar y ver todos sus comportamientos.

Mientras ordenaba el laboratorio me puse a pensar en todo, esta semana Jin había peleado más de lo normal con su novia y eso me había dado más ventaja para acercarme a él, aunque más allá de miradas no pasaba y no se me ocurría como podría llegar al sexo.

Pero ahora no tenía tiempo para eso, hoy había sido un día muy largo, agotador y muy estresante por todo, comenzando por el show que me hizo Tae en la mañana y terminando por el voluntariado.

- Creo que esto de traerme al baño a rastras se te está haciendo costumbre - dije algo sorprendida por su cara, se veía molesto.

- Cállate y escuchame - habló serio - no quiero que vuelvas a juntarte, hablar o siquiera pensar en Jin, aléjate, lo conozco perfectamente y se que él no es bueno para ti - en ningún momento cambio su rostro serio.

- Tampoco tu y aún así estas aquí - me cruce de brazos - ¿Te das cuenta que estas actuando como un maldito celoso? - el alzó la ceja mirándome incredulo.

- No te ilusiones niña, me sigues cayendo mal, es solo para que no te haga daño - seguia sosteniéndome la mirada - es mi buena acción del día - sonrió de lado.

- Entonces preocúpate de tus malditos asuntos y yo de los míos, con quien salga o no, no te incumbe.

Cerré la carpeta completamente enojada al recordar todo, no sabía que era lo que realmente pretendía Taehyung, pero no iba a dejar que me viera la cara de imbécil, respiré profundamente y me paré frente a la puerta de la oficina de Seok Jin, estaba a punto de tocar, pero los gritos dentro me detuvieron, acerqué mi oído para escuchar claramente, Jin parecía estar hablando por teléfono.

— ¡ME DA IGUAL, ODIO TUS MALDITOS CELOS ENFERMIZOS! — suspiró frustrado — ¡ES MI ALUMNA MALDITA SEA! — golpeó la mesa — ¡BASTA! — oí otro suspiro y luego un ruido, pareciera que se había tirado en la silla exhausto — hoy me iré a casa, como sea no estoy para aguantar tus malditos gritos, llámame cuando confíes en mi, de lo contrario no pienses hacerlo.

Excelente.

Sonreí un poco y acomodé mejor mi escote, oí como Jin tiraba el aparato encima del escritorio, toqué la puerta tres veces antes de entrar, Jin estaba con la corbata medio desabrochada, tenía los ojos cerrados y su cabeza descansaba en la silla.

— Disculpe, ya tengo lo del día, listo y ordenado — el levantó la cabeza, vi perfectamente como su manzana de adán se movía debido a que tragó algo nervioso cuando vio "disimuladamente" mi escote — ¿Qué pasó? — fingí preocupación — no se ve bien — dejé los documentos en la mesa y di la vuelta acercándome a él tomándole la cabeza.

— No es nada malo — cerró los ojos al sentir mi tacto — solo estoy algo frustrado, debo llevarme trabajo a casa, es... — levantó la vista y volvió a tragar saliva — es mucho — señaló la mesa, saqué mi mano despacio de su cabeza y le di un vistazo al escritorio, habían papeles esparcidos por toda la mesa.

— Yo podría ayudarle — me ofrecí mirándolo de nuevo — para mi no es problema quedarme hasta tarde, mañana no tengo clases así que podría hacerlo — sonreí — podríamos terminarlo en mi departamento o en el suyo, como guste ¿Qué dice? — sugerí alejándome un poco de él.

Dudó unos segundos, pero luego aceptó, de camino pasamos a su casa ya que tenía que sacar algunas cosas y cambiar su uniforme por algo más cómodo, me quedé en el auto esperándolo mientras el hacía sus cosas y aproveche de mandarle un mensaje a So Yeon.

Yo:
So, voy con Jin al departamento, dime por favor que no estas ahí.

Segundos después me llego un mensaje de So Yeon.

— Vaya que rápida.

So Yeon:
¿Qué comes que adivinas linda?
Hoy no pasaré la noche ahí, así que es todo tuyo, suerte.

Suspiré tranquila y espere a Jin.

Minutos después salió, vestía un traje casual elegante que le quedaba jodidamente bien, un mini shock se apoderó de mi y una corriente eléctrica recorrió por mi cuerpo al verlo, subió al auto con tranquilidad, sonrió y arrancó.

En el camino no dejaba de verlo, era increíblemente extraña la sensación pero me gustaba, se veía como una persona completamente diferente.

— Si no cierras la boca, caerá tu baba — habló sonriendo, me incorporé en el asiento y tosi algo nerviosa — ¿Cuál es la dirección? — cada vez me sorprendo más, había cambiado su vestimenta y junto con eso el tono de voz, era más grave de la que estaba acostumbrada a escuchar.

Al llegar al edificio subimos en el ascensor, estaba nerviosa ya que sentía la intensa mirada de Jin en mi como si estuviera desvistiendome.

— Bien puedes pasar, ponte cómodo — dije tratando de sonar natural — estas en tu casa.

— Gracias ______ —;sonrió — ¿Los papeles los bajaste? — dijo aún mirándome fijamente.

— Mierda, yo, lo siento, estaba tan...

— Concentrada en mi que se te olvido bajarlos — me interrumpió acercándose un poco.

¿Acaso coqueteas conmigo Kim?

— ¿Estoy en lo correcto? — dijo bajo.

¿Te gusta que sea tímida?

— N... no doctor... creo... creo que confunde las cosas.

— Bien — se acercó a mi y tomó mi cintura bruscamente, le di una mirada asustada y automáticamente sonrió — ¿Entonces no me mirabas?  — soltó ronco.

— ¿Q..qué hace? — dije con timidez, se acercó a mi oído y lo lamio con lentitud, sentí su aliento cálido en mi oído.

— ¿Me guiarias a tu pieza?

💜