Una apue$ta y 7 orgasmos • [Tú x BTS] [TERMINADA]

•21•

•A Kid•

El portazo que dio Seulgi nos sacó de todos nuestros pensamientos, nos dimos una mirada y salimos sin decir palabra de todo lo que acababa de pasar.

— ¿Por qué escaparte de ella? — me aclare la garganta y comencé a guardar mis cosas.

— N...nada en especial, solo no la soporto — reí al notar aquel tono y como disimuladamente trataba de tapar la notoria erección que tenía, Jungkookie parecía estar avergonzado.

So-Yeon no me mintió cuando me dijo que este chico era realmente tierno.

Se formó un silencio nada incómodo para nosotros por unos segundos, Jungkook miraba hacia abajo intentando cubrir sus rosados cachetes llenos de vergüenza mientras yo solo moría por velo.

Pero el sonido de mi celular lo interrumpió.

- So linda ¿Qué pasa?

- Bonita, dime por
favor que no estas
yendo a mi casa.

- Estoy en la
universidad aún.

- Ocurrió algo, tengo
una cena familiar hoy y
mi departamento aún está
lleno de hombres de Sun
woo, por favor no vayas.

- ¿Dónde me quedaré?

Solté un suspiro cansada de toda esta situación.

— P...puedes quedarte conmigo — soltó entonces Jungkook, yo lo miré sorprendida.

‐ ¿Quién es?

- Jungkook.

- Baby, te la dejo en
tus hermosas manos.

Colgó luego de decir eso, reí debido a que sabía por qué lo había hecho y suspiré revisando mis mensajes, eran muchos, sentí entonces una mirada en mi y levante la cabeza, Jungkook me estaba mirando.

Era tierno.

— ¿Te han dicho que eres una masita de algodón muy adorable?

— Esos son Jiminie, Hobi y Tae — respondió con un todo de vos levemente ronco.

Mi cuerpo tembló.

— ¿Estás seguro que puedo quedarme contigo? — cambie el tema.

— Si no hay problema.

•••

— Puedes acomodarte, ¿quieres algo para comer o tomar? ¿Estás bien?

— Yo, si lo siento Kookie, estaba mirando tu casa es impresionante.

— ¿Quieres algo para tomar? — preguntó mientras sonreía.

— Un te está bien — dije.

Jungkook desapareció yendo a la cocina, yo me senté en el sillón.

Estaba aturdida por lo que había visto, cuando pasamos por las calles en el ventanal de un restaurante estaba SoYeon, no se me hizo extraño que estuviera sola, ya que su familia siempre llegaban tarde.

Pero segundos después la persona que ocupo el asiento desocupado frente a ella no era su padre o su madre como suponía, si no que Taehyung.

Estaba sumergida en mis pensamientos, tanto que no sentí a Jungkook llegar a mi lado, cuando me habló me sobresalté, lo miré poniéndome la mano en el corazón dándole a entender que me había asustado, el sonrió.