Capítulo II

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Creencias y Crudezas.

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Escucha un tintineo, uno muy ligero que aunque no es ruidoso es tan pacífico, como si le brindará una suave caricia a cada dantian.

Siente la brisa de la mañana, cálida y fresca a la vez, y en algún momento solo se concentra en ello.

El aroma esta impregnado de lotos y hay otro olor más en el aire que no sabe identificar, lo raro es que este olor trae una añoranza a su alma que lastima... no sabe porque duele; solo sabe que lo extraña.

El susurro de las aves e incluso el silencio hace que se sienta familiar, sin embargo, aquello se ve interrumpido cuando ligeros murmullos se cuelan en la habitación rompiendo su fina y delicada paz, aquel momentáneo silencio se manchó con aquella voces las cuales no entiende, no es hasta entonces que se percata del horrible y agonizante dolor que yace sobre su cuerpo, siente cada hebra de su ser pesada y punzante; Jiang Cheng fue herido de las peores maneras; debido a eso tiene una resistencia al dolor muy fuerte y sin embargo, este dolor es tan horrible que esta a nada casi de llorar, siente que han destrozado su cuerpo, fragmento por fragmento, así que confundido intenta inútilmente abrir los ojos los cuales no responden a su voluntad, es como si hubiera sido drenado de toda energía y solo tuviera la minúscula fuerza para respirar, cosa que también se le dificulta.

—Esta débil todavía.

Escucha decir a alguien, su voz es algo delgada y por su acentuación nota que es una mujer mayor, siente unos ásperos pero gráciles dedos sobre su frente la cual tiene un paño húmedo.

—La temperatura parece que ha bajado, sin embargo, la del niño... alta verifi... lo curan... ro —derrepente la voz empezó a alejarse una vez más delicadamente hasta que solo escucho frases entrecortadas.

Entonces Jiang Cheng se empeño en poner más atención, inútilmente intento mover sus dedos pero no podía estaba tan cansado, a veces era arrastrado por la inconsciencia y todo se quedaba en un momentáneo silencio y oscuridad, y para cuando volvía no sabía cuanto tiempo había pasado, para el era solo un pestañeo pero realmente desconocía su situación, era un dormir y un despertar, era desesperante ya que cuando entraba en consciencia era solo para tomar un amargo líquido que sabía horrible y lamentablemente ni si quiera podía ver que era lo que bebía, estaba demasiado débil demasiado indefenso, eso no le gustaba; estaba empezando a entrar en la desesperación, porque no sabía nada de A-Ling, ni si quiera recordaba los eventos pasados, solo recordaba que estaban en el jardín de la Torre Koi en la dichosa fiesta del Líder Jin y nada, no hay nada, no sabe que pasó para terminar así, ni siquiera recuerda el transcurso de ese día.

Así que nuevamente abre los ojos y al instante los cierra siseando de dolor ante la brillante luz del Zhōngwǔ¹ Jiang Cheng maldice por lo bajo y siente raspoza su garganta, abre lentamente los ojos tratando de acostumbrarse a la luz tan cegadora de la tarde, le duele su cabeza y los ojos, pero resiste y no se queja, su vista vaga por toda la habitación y por alguna razón se le hace tenebrosamente conocida, hay una sensación de temor que recorre su torrente sanguíneo que lo deja helado.

Su pecho se siente compromido, como si no pudiera respirar es asfixiante el el hecho de ni en sus más remotas batallas había terminado tan cansado como lo esta ahora, ni si quiera cuando paso La Campaña para derribar al Sol termino tan agotado. Observa con pasirmonia aún acostumbrandose a la luz los vendajes que tiene, algunos parecen recientemente cambiados y otros están algo percudidos los cuales dejan ver algunas manchas rosadas signos de que el vendaje debe cambiarse pronto; tiene vendajes en su antebrazo izquierdo, otro en su abdomen bajo y uno más en su muñeca izquierda; hay algunos cuencos vacíos en una mesa con utensilios médicos, algunos vendajes están llenos de sangre mezclado con miasma, y su túnica inferior esta hecha jirones manchada de barro y otros fluidos que no quiere ni reconocer, porque se da cuenta que su situación es grave.

Cuando se marchite el LotoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora