Cuando se marchite el Loto

Capítulo IV

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Olla de grillos.

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¿Uh?

El líder Jiang confundido suelta el moribundo cuerpo del joven que acaba declararse hijo de su hijo. El peso muerto es lo único que se escucha, la mayoría tiene los ojos abiertos, entre el desconcierto y la confusión. «Que clase de blasfemia se osa a decir.» es en lo único que Jiang Liu puede pensar. Observa nuevamente a Jiang Shui quien se levanta de su posición vergonzosa y corre hacia el. No lo entiende.

Donde está tu orgullo.

Por su parte Jiang FengMian se quedó pensando demasiado confundido; sabe que lo más seguro es que sea una calumnia y que esa persona que acaba de declararse su hijo solo busca una manera de escudarse... es eso ¿no? , sin embargo, por alguna razón, hay algo que no lo deja terminar de estar tranquilo.

—Joven Maestro —murmura Wei ChangZe a su costado. —Hay que esperar a que Jiang-Duren nos explique no se preocupe.

—Wei ChangZe ese es el problema, no puedo quedarme tranquilo.

Su más fiel amigo lo mira y ladeando su cabeza le pregunta: —¿Realmente cree eso? —señala al cuerpo tirado en el suelo. —Por lo que mis ojos ven, usted no se ha casado con la Doncella Yu y a lo que mis ojos pueden juzgar el parece tener su edad.

Jiang FengMian no puede negar eso; pero que clase de idiota tendrías que ser para declarar eso. Eso es lo que le preocupa.

—Creo que no has entendido ChangZe. —FengMian suspira con pesimismo.

—Oh Joven Wei — interrumpe Saren,  utilizando ese tono que se usa para tratar a un niño tonto, toma su hombro con bastante camaderia queriendo recalcar sus palabras—el Joven Maestro Jiang se refiere a que hay demasiadas excusas, pero decir que es hijo del Joven Maestro Jiang es...  como decir que las nubes son de algodón.

Wei ChangZe asiente comprendiendo.

—Simplemente no tiene sentido —murmura el sirviente entendiendo a lo que querían llegar.

—Exacto Joven Wei.

Cangse siguió observa con interes. «Fue bueno a ver venido.» Piensa con una sonrisa. 

En cambio Yu ZiYuan observa todo expectante, aunque está confundida al igual que todos aquí, no procura decir algo; sus arañas se mantienen cada una a su costado de manera protectora.

Jiang Cheng está desmayado en los brazos de Jiang Shui quien quita la tierra del rostro del más joven. Tiene fiebre y el miasma no deja de salir, necesita la cirugía.

—Explicate Jiang Shui. —ordena tajante el Líder de Secta Jiang demasiado molesto.

Jiang Shui lo observa en suplica.

—Por favor mi Líder déjeme salvar la vida del Joven Maestro.

Jiang Liu fruncio el ceño.

—Jiang Shui ¿estas calumniando junto a este desconocido?

Hay amenaza en su voz pero Jiang Shui no le teme. Ella necesita salvarlo,   hay algo más, algo que necesita ser descubierto.