Enséñame a amar (MTUH parte 2)

Capítulo 2

(Ben en multimedia)

Capítulo 2: Déjame 

-mía- susurra en mi oído 

Me separo incómoda y lo miro sin entender. Su padre, por como lo ha llamado el chico lo mira con los ojos abiertos y con ganas de darle unas cuantas collejas. 

-No le hagas caso, cariño, está con sus estupideces.- dice estirándole del brazo, mira al chico con mala cara y el me observa. 

-Lo siento, me confundí de persona- dice 

Yo lo miro y algo dentro de mi se rompe y no sé porqué.

-Tranquilo, no pasa nada- agacho la cabeza- nos vemos mañana- le digo a Adrien, el director. 

Salgo de la sala incómoda. 

-La has asustado, idiota.- escucho de fondo. 

Vuelvo a casa con los papeles de mi instituto,  y con un nuevo trabajo. Al llegar me dirijo a mi habitación para acabar de ordenar las  cosas que me quedan. Abro la primera caja y me encuentro con fotos y regalos de mis amigas, coloco los marcos de fotos  en el escritorio y las fotos sueltas las coloco en un hilo con unas pinzas alrededor del cabezal de mi cama. Abro la segunda caja y me encuentro los papeles y libros de lectura, estos los coloco en las estanterías junto a la ventana y los papeles los reviso y los tiro porque son cosas que no me sirven. Acabo de colocar las pocas cosas que me quedan y me queda la última caja, la abro con miedo porque se lo que hay, aunque más que miedo es nostalgia.

Miro la primera foto y kilian, mi exnovio, sale en ella su pelo brilla al sol y su sonrisa con sus dientes blancos y su hoyuelo, sus ojos azules como el mar pero fríos me recuerda a los ojos del chico que me confundió con alguien. 

Kilian y yo comenzamos ha salir hace un año, nos conocimos en la primaria y nos hicimos inseparables, nunca conocí a su madre pues ella murió cuando él tenía cinco años y su padre, Jack, nunca me gustó, me transmitía mala vibra y siempre estaba ocupado, mamá nunca aceptó la relación que tuve con él y cuando nos mudamos aquí los dejamos, el decía que el amor a distancia no era bueno, pero cuando alguien ama a otra persona la distancia no pone limites.  Sigo observando las fotos y las cartas y las dejo en la caja sin tirarlas, es un recuerdo nostálgico que no quiero olvidar pues aunque las cosas no salieron bien aprendí. 

-Landa, baja que vamos a cenar- escucho el grito de mamá

Bajo las escaleras dejando todo tal cual esta y voy con Ash y ella a cenar. 

-¿Tienes todo listo para mañana?- pregunta 

-si- respondo-¿No venía la tía Melody a cenar pizzas?- pregunto curiosa 

-a tenido un problema- su seriedad me da  a entender que no vuelva a preguntar 

Saco otro tema y la cena la pasamos conversando y explicándole como es el instituto y el sitio  dónde trabajaré. 

Una vez hemos acabado de cenar le ayudamos a recoger la mesa y cada uno se va a su habitación, ayudo a Ash a preparar las cosas para mañana y lo acuesto y yo hago lo mismo. 

Me estiro en mi cama y el olor a lavanda entra en mis fosas nasales y me relajo, pongo la alarma y cierro mis ojos. 

Y me quedo dormida pensando en esos ojos. 

(***)

-Ash, date prisa que llegaremos tarde- digo subiendo las escaleras a mi habitación. 

-Ya voy.