El tiempo se para en cuanto ella lanza la maldición. Draco se aparta, como repelido por un imán y cierra los ojos esperando al intenso dolor que llegará de un momento a otro… Pero que no llega…
Tras unos segundos, el rubio Gryffindor abre los ojos de nuevo y contempla a Hermione que seguramente esboza la misma expresión confusa que él mismo.
Ella lo mira con la boca abierta.
-¡¿Por qué no ha ocurrido nada? –Piensa mientras la confusión comienza a dar paso a la comprensión y lejanamente se atisba la humillación.
No ha funcionado porque en realidad no quería hacerle daño. ¿Y por qué no quiere hacerle daño? Un mazo de conocimiento golpea la cabeza de la castaña empujándola a que ella misma lo asuma.
-Creo que te gusta, Hermione… quizás… quizás incluso algo más… -Su propio juicio, siempre tan atento, le escupe esas palabras, y ella, una vez más se niega a creerlas.
Pero esta vez es distinto. Es incluso estúpido porque eso lo explica todo: La extraña desaparición del Laccio, su celos irracionales, su depresión y confusión constantes y ahora esto, no puede hacerle daño intencionadamente…
Alarmada, tras haber concluido la fase de comprensión a la vez que Draco, observa cómo el chico va a comenzar con la última fase de ese desagradable acto: Humillación.
Draco traza una sonrisa casi macabra en su rostro. Está enfadado, claro que sí. ¡Pretendía torturarlo! Aunque al final no lo haya conseguido, la intención es lo que cuenta. En ese momento no sabe cómo reaccionar ante los sentimientos que al parecer alberga Hermione, porque sabe que los tiene… Ninguna chica a la que hubiera besado antes se había entregado a él con esa suavidad ni esa confianza que lo hacía actuar tan irracionalmente cuando la tocaba.
¡Por Merlín que lo iba a volver realmente loco!La sonrisa persiste en su rostro. Ese es el momento que él necesita para mostrarse a sí mismo que en realidad ella no es nada más importante que cualquier lío que haya tenido en Hogwarts. Y probablemente será el único momento en el que ella esté lo suficientemente débil como para no poder hacer nada… así que Draco va a aprovecharlo, por supuesto que sí…
-¿Te ocurre algo, Hermione? –Pregunta con retórico sarcasmo. –Porque me parece que un Cruciatus… ya sabes… debería sentirse.
Una carcajada sale naturalmente de su garganta y un nuevo recuerdo llega a su mente. Como cuando hace unos años se peleaban por los pasillos varias veces al día lanzándose pullas e insultos denigrantes…
Si lo piensan bien, ambos saben que han vivido muchas más cosas juntos de las que ninguno de ellos se acuerda y de las que se deberían vivir con tu "peor enemigo".
Hermione se siente impotente. Ahora le toca a él ser letal y ella está atada de pies y manos. Furiosa, tira la varita contra la pared e intenta dar un paso hacia la puerta, pero él la sujeta.
-¿No contestas? A lo mejor tu hechizo ha fallado porque no eres tan buena bruja cómo crees… -Draco decide usar el mismo jueguecito de seducción que ella misma ha utilizado hace sólo unos minutos. Se acerca a ella, aspirando el aroma dulce de su cabello. –O lo que no es cómo crees es lo que piensas de mí…
Hermione no se libera del agarre del chico, siente la furia correr por su cuerpo y la ligera duda de si sabe algo se está volviendo demasiado pesada como para ser soportable en ese momento. Tiene que escapar como sea y ya mismo.
-Malfoy, creo que te lo estás tomando demasiado en serio.
-¿Tú crees? ¡Has estado a punto de torturarme y yo me lo estoy tomando demasiado en serio! –Sin pensarlo aprieta un poco más su agarre hasta que ella hace una pequeña mueca de dolor, pero no dice nada ni produce ningún sonido. Draco la suelta de inmediato. Sabe que la ira se está apoderando de él y eso no es bueno. Nunca sale bien.
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Cambiando Los Papeles [Dramione]
Fanfiction¿Alguna vez has imaginado cómo sería la historia al revés? ¿Qué sentiría Draco al ser humillado por Hermione y cómo le sentaría a Granger ser la reina de las serpientes? Descúbrelo aquí, porque nada es lo que parece Créditos a: lizze213