♥️UEM♥️ (+18) (Argentina x Todos)

Capítulo 10

Rusia abrió la puerta que daba a la azotea para permitirle al más joven pasar antes que el, entonces el argentino salió afuera. Cuando salió, sintió un extraño sentimiento, el sol se estaba ocultando entre los altos arboles del bosque y aún eran iluminados por los suaves rayos del sol, permitiéndoles apreciar un hermoso atardecer. El argentino se vio hipnotizado por la belleza de aquel paisaje, y se le hizo imposible apartar la vista de aquel lugar, el viento hacia flamear su cabello celeste como su bandera, sintiendo una bonita sensación de frescura mientras aún contemplaba el bello paisaje que tenia en frente.
 
-... Que precioso.... -pensó en voz alta, fascinado por lo que estaba viendo.
 
-... ¿Te gusta? -pregunto Rusia de pie detrás suyo.
 
-... Si -asintió -me encanta... es... es una belleza... -dijo con brillo en los ojos.
 
Rusia vio que Argentina estaba muy fascinado por aquel paisaje... no entendía su comportamiento, y porque se lo tomaba de esa forma, claro que no negaba que el paisaje era bonito, pero pensaba que no era para tanto. Seguramente el argentino nunca habia visto un paisaje así para ponerse de esa forma... o tal vez tenia otro significado para el.
 
-¡Oh, Rusia, mira!
 
-¿Mm?
 
Rusia vio lo que el argentino señalo y vio que se refería a una paloma blanca no muy lejos de ellos, una paloma blanca muy hermosa que estaba mirándolos.
 
-... ¿Que diablos hace una paloma aquí? -pregunto Rusia algo confundido de ver una paloma blanca en esa zona.
 
-No se... pero es hermosa... -dijo con ternura y con ojos brillantes.
 
-.....
 
Rusia se sorprendió al ver que aquella paloma emprendió vuelo y se acerco a ellos, más específicamente a Argentina, quién también se sorprendió. El argentino le extendió tímidamente las manos, permitiéndole a aquella paloma aterrizar y acomodarse en ellas.
 
-Ohh... hola, hermosa... -dijo Argentina mirando a aquel animal con ternura y acariciándola mientras se dejaba.

-... ¿Eh? ¿Que...? ¿como...? ¿Como diablos...? -dijo Rusia sorprendido al ver que un animal se acercara de esa forma tan confiada a un ser humano totalmente desconocido.
 
-Ay, que linda...
 
-... Parece que es una paloma domesticada... y parece que seguramente alguien la habrá soltado por ahí y ahora esta perdida... -dijo Rusia analizando la situación -Tal vez sea de alguien... debemos devolverla.
 
-... No, Rusia... no quiero que este cautiva... -dijo Argentina acariciándole la cabeza suavemente con los dedos mientras el animal acariciaba su cabeza contra el rostro del argentino.
 
-Argentina... esa paloma debe ser de alguien, no es muy común ver palomas blancas aquí, seguramente era de alguien que se le escapo. Puede que el ambiente de aquí no sea adecuado para ella, tal vez se desoriente y no sepa que hacer...
 
-... No importa Rusia... ella hace un rato estaba suelta y totalmente bien, va a saber arreglárselas... -dijo separándose para ver al animal con ternura -tiene que ser libre.
 
Argentina le dio un besito a aquella paloma y la extendió para darle permiso de irse, entonces aquella paloma abrió sus alas y emprendió vuelo, volando hacia el atardecer. El argentino no desvió su mirada de aquel animal, y lo observo mientras aún podía verlo alejarse... Rusia no estaba de acuerdo con dejarla ir, pero el argentino ya la habia soltado y ya se habia ido muy lejos, así que ya no habia marcha atrás.
 
-... Que preciosa... como me encantaría ser ella...
 
-¿Que?
 
-Nada, perdón......
 
-... ¿Por qué?
 
-Nada, olvídalo...
 
-¿Por qué, Argentina?
 
-.......
 
-¿Por qué lo dices?
 
-... Es que... me encanta la imagen de esa palomita volar libre hacia el atardecer..... -dijo con ternura -es una escena tan... bonita... no se porque....
 
-......
 
-Me hace querer estar ahí, poder sentirme libre...
 
-... Pero ya estas libre, no estas encadenado...
 
-...........
 
El argentino se mantuvo en silencio unos segundos.
 
-..... Ya lo se.... -respondio soltando un pequeño suspiro al final de la frase.
 
Rusia no podía ver el rostro del joven argentino, pero aún así, sabia que su sonrisa se habia desvanecido, no hacia falta verle la cara para saber eso, lo habia notado en su voz.
 
Vio como Argentina llevo sus manos a sus brazos para auto abarazarse y frotarse su fina piel, ya que a pesar de estar delante del sol, Moscú era un lugar muy frio, y Argentina traía una ropa muy descubierta.
 
-Argentina... estas temblando.
 
-Ya se...
 
-... Ven aquí -dijo desabrochándose su chaqueta.
 
El ruso se quito la chaqueta y se lo puso encima de los hombros con la intención de abrigarlo.
 
-Uff... gracias... -dijo Argentina cubriéndose el cuerpo.
 
-De nada......
 
El argentino no volteo a verlo, solo continuo mirando el paisaje sin decir una sola palabra... Rusia solo suspiro y se sentó en el suelo a un lado suyo.
 
-... ¿Por qué te vistes así?
 
-¿Y que esperabas? tu padre me dijo que no se molesto en bajar mi ropa del avión, no tengo más ropa que esta...