Choque

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Advertencia: Mención implícita de temas delicados.

Edit. Doble actualización, ya lo tenía hecho, además de que era uno de los capítulos que había planeado desde la primera entrega. 

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No era para nada en vano, conocer los hábitos que tenía su mejor amigo. Puede saber cuando esta triste, enojado, frustrado o feliz con sencillas acciones o comentarios. Es por eso que puede decir con toda la confianza que Ryoken tenía algo desde varios días atrás y más, precisamente luego de aquel mensaje. No quiso hablar, pero tampoco es como si quisiera involucrarse a lo que le pasaba, sin embargo luego de una semana en la que Ryoken seguía sin hablar y trasnochar, era más que suficiente para intervenir.

Ambos se habían despedido y aunque normalmente se hubiera dirigido a la cama, espero al otro lado de la puerta a que ningún ruido se escuchara del otro lado de la puerta. Esperó a que el tiempo pasara hasta que una hora después finalmente salió del cuarto y, sin hacer ruido, se dirigió al cuarto de su amigo.

Pego el oído de la puerta contrario ,esperando escuchar algún ruido pero nada. Toco un poco con el mismo resultado por lo que abrió la puerta y confirmas sus sospechar y ver la cama tendida, sin embargo antes de que pudiera dar aviso al resto de generales, vio la puerta del armario abierto a la par y a sus pies un portafolio gris. 

Spectre se dirigio hacia este solo para que sus ojos se sobresaltaran.  

—no puede ser.

Salio rápidamente del cuarto, tenia que llamar a Aso o Kyoko, sin embargo antes de apresurarse tenía que confirmar sus nuevas sospechas. Tenía que salir de la mansión y se dirigirse a la zona marginal de la ciudad.

Cambiando completamente su habitual vestimenta, llego al lugar donde no sospecharían, pensarían que solo era un chico buscando satisfacer su hombría con una prostituta o buscando algo de drogas. Sabia donde se dirigía, llego a una vieja obra negra donde dos hombres vigilaban el área. Los sobornó para que lo dejaran pasar y estos aceptaron. Siguió las instrucciones que le dieron y continuo su camino.

Spectre atravesó el oscuro túnel y cuando finalmente vio la luz del otro lado, toma asiento en una de las pocas mesas que aun estaban disponibles para los apostaderos. Alguien se acerca y le entrega un pequeño panfleto sobre las actividades de la noche, mira breve mente la hoja y la dejo botada sobre la mesa. Podía ver como varios lugares ya estaban ocupados por hombres y mujeres vestidos exquisitamente esperando que comenzara el siguiente espectáculo.

Era una leyenda urbana para jóvenes de su edad y menores, sin embargo los mayores podía recordar perfectamente esta modalidad de duelos ilegales pero que dejaba muchas ganancias para los apostaderos y saciar un poco aquella vena sádica que todo ser humano poseía.

Gira el rostro hacia el campo donde dos personas se batían a duelo, uno de ellos atacó llegando a destruir al monstruo, se escucho como el público se regocijaba por los gritos de dolor que daba aquel infeliz por la perdida de su bestia y puntos de vida.

Pero para Spectre, no hacia falta decir que aquel chico solo jugaba con su adversario,  lo engañaban para que ganara confianza solo para que luego él se la quitara con su excelente estrategia y atacar directamente.

Así de rápido y fácil había sido el duelo, así era el estilo que Ryoken utilizaba cuando se enfrentaba en los duelos del inframundo.

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Todas las personas tenían secretos, y este era tal vez era el más grande secretos que tenía el joven ex ciberterrorista que solo tres personas sabían y ellos preferían morir dolorosamente antes de revelarlo.

un día extraordinarioDonde viven las historias. Descúbrelo ahora