El amigo de un amigo es...

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Si no fuera porque Spectre y Fujiki conocían muy bien a sus respectivas parejas, podías jurar que Miyu y Ryoken tenían algo mas que una simple amistad. 

Ya se había hecho común ver a ese par muy juntos. Desde la invasión a la propiedad por parte de la chica para sus reuniones con sus amigas; salidas al centro por parte de ambos para conseguir víveres o simplemente tomar una taza de café en el puesto de Kusanagi, Ryoken y Miyu simplemente eran buenos amigos. 

Sus parejas, a veces, expresaban  que pasaban mucho tiempo juntos y aunque ellos no eran celosos, aquella cercanía podía interpretarse como algo más quienes no lo conocían; sin embargo, ellos mostraban seguridad de que no había nada ; y si eso no los convencía, tenían excelentes formas de hacerles bajar esas inseguridades. Era gracioso ver como el par de chicos tan serios ganaban un poco de color  en sus rostros con solo imaginar las divertidas actividades físicas que harían más tarde.

Las primeras vez no hubo problemas, sin embargo cuando se dieron cuenta de las constantes salidas, ambos  encararon a sus parejas y estas respondieron con sinceridad que solo eran muy buenos amigos y les gustaba salir debes en cuando a solas y que sería demasiado bajo que alguno pensara en traicionar a su compañero de cama. 

Y aunque ambos demostraban que solo había entre ellos una muy buena amistad, lo que no sabían es que Ryoken y Miyu tenían algo que solo a ellos los concierne. 

Todo había pasado una semana antes de que los origenes de Earth y Aqua dieran oficialmente su relación. Ryoken miraba extrañado a su mejor amigo, algo tenía y no sabía como describirlo.  nunca

En un principio estaba feliz, pero ese sentimiento desapareció cuando le hablo de la castaña y la relación que tenía con ellos. Rápidamente quiso decirle que era una pésima idea, y para agregar más sal a la herida, el ojiazul expresó que realmente estaba interesado en intentar algo con ella y esperaba su aceptación en su relación.

Era la primera vez en la vida de Ryoken, que Spectre mostraba un genuino interés en alguien  fuera de los caballeros de Hanoi; ni sus generales habían logrado ganarse la simpatía del chico, simplemente porque desconfiaba de los adultos o cualquier figura de autoridad. 

Cuando el oji azul trajo por primera vez a Miyu a la casa, sabía que eso era una pésima idea, una noche ante de la invitación la investigo y encontró su oscuro pasado, realmente no se había esperado que uno de los niños del incidente expresara su ira de esa forma. Solo tenía que recordar como terminaron Yusaku, Takeru, Jin y el cuatro sujeto cuando dejaron que sus sentimientos negativos los dominaran, esperaba que ella, al ser mujer y por mentalidad eran seres más "consientes", pudiera tener mejor perspectiva de las cosas, sin embargo fue algo igualmente catastrófico.

Los tres cenaron tranquilamente a pesar de que se podía sentir la tensión en el ambiente, Spectre hacia de intermediario, y aunque la chica ponía de su parte, al final Ryoken se retiro antes, justificando su presencia por cuestiones laborales. Los dos se despidieron y no volvieron a verlo hasta el día siguiente, cuando Ryoken regresaba a la casa y los dos menores se despedían con un sencillo beso en las mejillas.

Ryoken no habló sobre lo sucedido el día anterior, ni Spectre dijo comentario alguno, siguieron las cosas con suma normalidad,  solo para que tres días después, en la tarde, cuando el sol estaba ocultandose,  alguien tocara su puerta y  al momento de abrirla, encontrarse nuevamente a la chica, estaba vez sin su amigo. 

—Miyu,¿Que haces aquí? 

—Vengo a hablar. 

—Spectre no esta,¿ puedo darte el lugar donde esta? 

—Lo se.—dijo sin mas.— le dije a Spectre que pasaría a tu casa para hablar, dijo que hoy se quedaría vigilando la red, para que pudiéramos tener privacidad. 

un día extraordinarioDonde viven las historias. Descúbrelo ahora