━¡𝒓𝒂𝒖𝒍𝒕𝒂𝒃𝒐!

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((advertencia: fred y dan no existen))


(ayuda no me sale el user /cry)

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Enamorado de ti mi amor


El amor a primera vista si existía y Raúl lo había vivido.

La primera vez que lo vio fue en comisaría, resaltaba por su pelo rubio, su cuerpo y ojos, un hermoso color celeste cielo.

Algo raro era que la gente estaba callada esperando, sentados. Todos viendo a aquel rubio.

Se acercó y el rubio dirigió la mirada al de ojos verdes, poniéndolo nervioso.
Los pelos se le pusieron de puntas cuando vio que el de ojos azules se le acercaba con una sonrisa.

─hola, ¿viene por una denuncia?

Pregunto aquel rubio, el de ojos verdes miró el uniforme "inspector jefe Gustabo García", hasta su nombre era lindo, entonces él era de cual la gente hablaba por las calles, "gustabo con b de bombón".
Le quedaba perfecto aquel nombre.

─buenas, p-pues si.

Tartamudeo por los nervios, se le había olvidado el porque había venido.

─oh bien, por favor acompañame.

Le guió a un pasillo para que nadie más escuchara, en las manos de él había un cuadernillo pequeño y en la mano un lápiz.

─pues bueno caballero, soy todo oídos.

Raúl empezó a decir su denuncia, que básicamente había llegado hace algunas horas a la cuidad de Los Santos y ya lo habían asaltado, quitándole el móvil y su billetera.
Gustabo se mantenía en silencio escuchando al caballero de acento argentino, preguntaba lo que debía y callaba cuando debía.

También le había preguntado si había visto a aquella persona o como iba vestida, luego de eso fueron de nuevo al centro de comisario, ahí Gustabo le entrego un móvil y el dinero que le habían robado.

─bien Raúl, cualquier cosa nos llamas o vienes y cuidado por donde caminas.

Le dijo gustabo luego de entregarle todas las cosas.

─gracias pibe, sos un sol.

Se puso nervioso luego de analizar lo que había dicho, pero se le pasó cuando escucho la suave risa de él, ¿la podía poner de tono de llamada?, era hermosa.

─venga, nos vemos Raúl.

Luego de calmarse, se despide para al final ir de nuevo al lugar que estaba al llegar.

[🧁]

¿Como habían llegado a esto?, pues Rubier no lo sabía.
Estaba en una "cita" con Gustabo.

-unos días atrás-

Se habían encontrado de nuevo en una tienda de ropa, gustabo iba saliendo y él entrando.
Se quedaron conversando por algunos minutos, al final Raúl no compró nada y tampoco le importa.
Que estaba con la persona que le gustaba.

─hombre que me has caído super, ¿te parece si algún día salimos?

La sonrisa que tenía el rubio era simplemente perfecta.

─me parece re perfecto, ¿cual día quieres salir rey?

─¿te parece mañana?

─me parece la verdad más que perfecto, ¿a las 5?

─pues bien, a las 5. Ahora me tengo que ir, un gusto volver a verte Rubier.

─venga pa' nos vemos.

-presente-

Y ahí se encontraban, cenando comida real food gracias al más bajito.
Y para que mentir estaba más que delicioso.

La conversación no acabó nunca, las risas tampoco.

Los dos estaban felices.

[🧁]

Algunos meses habían pasados, muchas citas también habían pasados.

Era como si fueran amigos de toda la vida, se conocían a la perfección. Raúl tenia un trabajo en el cual salía más temprano e iba a recojer a gustabo, el cual salía más tarde.

Citas en restaurantes o en la misma casa con velas, formando una cena romántica, no faltaban. Parecían una relación literalmente.

"─mi rey, ¿acepta ser mi novio?─"

esas simples palabras dichas por aquel argentino hizo que a Gustabo se le parara por un mini segundo el corazón, lentamente el sonrojo que estaba en sus mejillas de forma suave, se fue expandiendo por toda la cara.

"─pues si, si quiero ser tu novio Raúl─"

Después de esas palabras, Raúl pudo soltar aire, de verdad pensaba que aquel chico, del cual se enamoro el primer día de haber llegado a la ciudad de Los Santos le iba a decir que no.

La cena terminó viendo las estrellas en una montaña, los dos abrazados, no hacía falta nada más.

Mientras ellos estaban juntos, nada podía faltar.

Porque el argentino amaba con todo su corazón al rubio.

Y porque el de ojos azules amaba al de ojos verdes, lo llenaba de paz.

Estaban tranquilos, porque sabían de que cada mañana a su lado iba a estar el amor de su vida, y que no lo tendria otra persona.

Porque los dos sabian todos los gustos de los dos, porque los dos se conocían tan bien, que nadie podría conocerlo más bien que él.

La noche había terminado con un beso, tierno. Demostrando lo mucho que se amaban los dos.

Los únicos testigos de esa hermosa velada, fue la Luna.

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Ammm, como el forro.
Espero les guste, en fin. Otro borrador.
Perdón por demorarme tanto<3
Nos vemos!

you are very cute!! || One-shotsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora