Todo parece un cuento de hadas, finalmente tengo a mi rey y mi reino se aproxima a la vuelta de la esquina, tengo una boda que planear y un futuro que disfrutar con los hombres más importantes de mi vida. Todo va muy bien después de tanto horror.
P...
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[En lo alto en medio de la nada, no lo sabes pero lo sabrás cuando llegues ahí. Camina lento y bajo sobre la cuerda floja. Espero que esto dure pero nunca se sabe, arriésgate podemos bailar en el aire, se siente tan bien que podría morir pero no me importa - LP]
Tom
La tomo de la mano y llevo escaleras arriba, mi pulso está demasiado acelerado y a penas puedo controlar mis impulsos. Me siento como un tonto por haber ocultado esto por tanto tiempo y también me siento ligeramente avergonzado por los miles de pensamiento que ciernen en torno a mi mente que tienen que ver con ella.
No soy la clase de amo que se complace en el dolor ni el sumiso que se complace recibiéndolo. Ese tipo de pensamientos y cosas las dejé solo como un pasatiempo que en un pasado me ayudó a superar una adicción, pero no es algo que ejerza en mi día a día, no soy esa clase de hombre. Esto para mi siempre ha sido simplemente algo que me gusta y ya.
Ella me mira a través de sus pestañas espesas cuando llegamos a la planta de arriba y empujo la puerta del cuarto para entrar con ella de la mano. Cierro la puerta con pestillo y la atrapo entre mis brazos, mis manos recorren su rostro como si se tratase de porcelana.
—Lo haremos como un juego — le digo pasando mi pulgar por su labio inferior — no soy de los que se complace haciendo daño Nena.
—¿Por que me ocultaste esto de ti? Pudimos haber hecho esto hace tanto tiempo — ella susurra disimulando una sonrisa ladeada que hace que entierre mis dedos en sus caderas incrementando mi deseo.
—Lo siento — digo observando sus manos sobre mi pecho, jugueteando con mis bellos mientras se muerde el labio — ¿Me dejas proceder? — me inclino hacia su boca y la beso suavemente, mordiendo su labio inferior y tirando de él mientras mis ojos la queman. Madison asiente y desabotono su vestido azul con esas hermosas flores blancas estampadas — no voy a ser brusco — el vestido cae al suelo mientras la observo bajarse las tiras del sostén por los hombros, cuando sus pechos están expuestos, tomo un respiro y me acerco empujándola despacio hacia la cama ella cae como una pluma sostenida por mis manos.
