Tú y yo ¿Siempre? ||Louis Partridge

Capitulo 25 Temporada 2

— Eh, sí, solo son algunas pequeñas cosas que quiero hablar con ustedes, no les quitó mucho tiempo — contestó 

— ¿Qué es lo qué pasa? — pregunto Louis 

— Dylan es un niño inteligente, no voy a negarlo, tampoco creo que ustedes puedan negar eso, Dylan siempre dice que quiere hacer lo mismo que su papá — dirigió su mirada hacía Louis — pero hay algo... A veces dice que no sale mucho, que le gustaría salir más con los dos y no solo con su mamá o solo con su papá, por lo que sé están juntos y Dylan los ve así, pero cuándo salen no, o sale con uno o sale con otro, él necesita verlos juntos y no solo en su casa, él está jugando afuera, yo solo tenía que decirles esto 

Agradecimos y salimos hacía el patio, tenía mi mirada perdida, pensando en sobre los que nos dijeron, tal vez sí me estoy equivocando en demasiadas cosas

— ¿Pensaste en lo que hablamos? — preguntó él, pero antes que yo pudiera respondió el habló — Ahí viene Dylan 

Él corrió hacía mí, me agaché un poco para poder abrazarlo, en cuanto nos separamos de ese pequeño abrazo él pregunto 

— ¿No te vas a quitar las gafas? — preguntó Dylan 

Di un pequeño suspiró, mire a Louis y él solo arqueó sus cejas, devolví mi mirada hacía Dylan y quité mis gafas con una leve sonrisa sin despegar mis labios

— ¿Cómo has estado hoy? 

— Bien — respondió con una sonrisa — ¿Iremos a casa? 

Me quedé en silencio un rato, sabía que ya no podía tenerlo ahí siempre que yo quiera 

— No... ¿Quiere ir a comer? O ¿Al parque? Dónde tú quieras 

— ¿Podemos ir a comer? — propuso bastante emocionado — pero no quiero que sea en la casa 

— Dónde tus nos digas 

Louis cargó a Dylan y salimos de ahí hacía el auto, supongo que estoy haciendo las cosas bien, pues Dylan se ve feliz y eso es lo que me interesa. 

Llegamos a un restaurante, y mientras Dylan jugaba en los juegos yo hablaba con Louis 

— Entonces si lo pensaste — sonrió de lado 

— Sabes que quiero lo mejor para Dylan, y sí a él le hace feliz esto... Está bien, pero de poco a poco — fruncí mis labios 

— Yo también quiero cuidar a Dylan, quiero protegerlo, pero no lo vas a tener encerrado toda su vida, ya escuchaste a la maestra 

— Sí, pero que sea poco a poco, incluso ahora me siento rara — arque mis cejas 

— Solo... Deja que haga lo que cualquier niño de su edad tiene que hacer — alzó sus hombros

— Yo lo hago — recordé 

— Pero — interrumpí

— Tiene que salir más de casa lo sé, no hace falta que me lo digas — moví mis labios hacía un lado con disgusto