— ¿Te gustó mi regalo?— Pregunté mientras la veía probarse su nueva chaqueta de Jean.
— ¿A dónde quieres que te acompañe? Te conozco Abel, me pedirás algo.
— La semana que viene son los Billboard Music Awards.
— Lo sé, estas nominado a 16 categorias entre ellas la canción del año.
— Respira, ahora sí... Quiero que me acompañes. Luego iremos a una fiesta con los productores que tanto admiras.
— ¿Yo? ¿Estas seguro? Pero no tengo ningún vestido para la ocasión. — Decía mientras miraba su silueta en el espejo.
— Ro, eres hermosa y mereces más que nadie ir a esa premiación. Aparte algún día te convertirás en una productora famosa y primero tienen que conocerte.
— ¿Puedo sentarme a charlar con Mattew Musto?
— No, claro que no.— No quería que nadie se le acercara más de la cuenta.
La noche se vestía de gala, las estrellas brillaban al igual que sus ojos, frente al espejo besaba mi cuello y arreglaba la corbata de mi traje. Una pollera de cuadrados blancos y negros adornaban sus interminables piernas, un top negro resaltaba el tamaño de sus senos y su tatuaje de flores. Su choker de piedras, cuidaba su cuello, labios teñidos de un violeta oscuro, pestañas arqueadas y sombras de glitter en sus párpados. Al verla, la saliva se escapaba de mi boca, se colocó su nueva chaqueta de jean y nos subimos al Mc Laren, los Billboard Music Awars anhelaban nuestra presencia.
— Amor ahi esta Omer Fedi.— Susurraba en mi oido apretando mi hombro.
— ¿Y ese quién es? Mira allí esta Sal y Rimah.
— Es el guitarrista de Machine Gun Kelly y el productor de The kid Laroi y Lil Nas X.
— Ve a presentarte yo estaré en el camarín con Sal y Taylor.
Como una niña corría entre la gente, charlaba con productores, admiraba el festival desde adentro, su sueño, el que anhelaba desde pequeña cuando su madre le encendia el televisor, se había hecho realidad. El único problema es que nadie me advirtio que esa noche sería el principio del final, el pasaje directo al inframundo sin regreso.
Me subí al escenario a reclamar el primer premio de la noche, la gente aplaudía pero mis ojos estaban situados en los de ella, ojos repletos de lágrimas que estropeaban su maquillaje. Aplaudía y gritaba mi nombre y eso que la noche recién comenzaba.
— Quiero agradecer a mi manager Sal, a mi hermosa novia y a todos los que confiaron en mí música. Paz ✌️
Robert estaba ansiosa, apretaba mi mano cada vez que mencionaban alguna categoria de música y cuando su ídolo Machine Gun Kelly subió al escenario, a reclamar su premio, casi se desmaya. No quería que se acercara a ese drogadicto ni mucho menos a la chupasangre de Megan Fox, su novia. Pero apenas me distraje un segundo alli estaba, halagando su música y todo lo que tenían para ofrecer. Esa fue la primera vez que Robert consumió cocaína, ese fue el principio del final. Si pudiera volver el tiempo atrás jamás la habría llevado a esa cuna de lobos. La hubiera cuidado más, porque era mi tesoro, sólo que me di cuenta de ello, cuando la perdí para siempre. Nuestra estrella en el cielo se agotó y era mi lujo.
Esa noche debía ser el hombre más feliz del universo, había ganado diez de diez y seis categorias en las que había estado nominado. Mi novia aplaudía y sonreía mis logros, mis amigos, hasta mi madre, estaban orgullosos pero la ley de la gravedad dice que todo lo que sube se hace pedazos sobre el suelo y mi momento terminó en un abrir y cerrar de ojos.
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La Disqueria | The Weeknd
FanfictionAburrido de las luces de la ciudad, Abel conduce fuera de las calles de Toronto y se encuentra con una disqueria abierta. Allí conoce a Robert, la chica de grande sonrisa y cabello gris, que con un abrazo cambiará su visión del mundo.