Descubiertos

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Dedicado especialmente a las hermosas personitas Angel_demon95, melocoton_con_crema, Clau_vargas, LindsayKateST, KGnzalez, emilie_Liz_C, GoldenLittlePrince, AlexaRequena8, crispcruz, GeraldineSandoval136, muchas gracias por todo el amor que le dan a la historia, hermos@s.

Dedicado especialmente a las hermosas personitas Angel_demon95, melocoton_con_crema, Clau_vargas, LindsayKateST, KGnzalez, emilie_Liz_C, GoldenLittlePrince, AlexaRequena8, crispcruz, GeraldineSandoval136, muchas gracias por todo el amor que le dan...

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— Ya basta Gguk — rió Lunes tratando de apartar a Jungkook quien lo tenía abrazado por detrás sujetandolo de la cintura mientras le dejaba pequeños besitos en su nuca y cuello — me haces cosquillas, basta — se volvió a quejar entre pequeñas risas.

— No quiero — negó Jungkook reacio a soltar a Jimin.

— Debo ir a mi aula — menciono tratando de safarse de los grandes y músculosos brazos de su novio.

— No quiero — repitió.

Lunes suspiro profundamente ante la respuesta recibida de parte de Jungkook y contó mentalmente hasta diez para lo que haría a continuación, pues necesitaba mentalizarse.

— Ggukie por favor, amor sueltame — menciono con voz suave y un pronunciado puchero.

Lunes sonrió internamente sabia que Jungkook nunca se negaba cuando hacía eso, sus pucheros eran como la criptonita para él, y por supuesto que aprovechaba eso a su favor, aunque siendo sinceros quien podría resistirse a sus pucheros, exacto, nadie, ni mucho menos su novio.

— No — negó Jungkook.

— Eso quería oír, muy...... — Lunes frenó sus palabras al procesar lo dicho por Jungkook, ¿no?.

¡No!.

Acaso Jungkook se había negado a su infalible técnica de "siempre me salgo con la mía con mis pucheros", mierda su arma más poderosa no había funcionado, ¿estaría perdiendo sus encantos?.

Jungkook solo podía morder su labio inferior reprimiendo la risa que se asomaba al ver a Jimin tan desorientado solo por haberse negado a su puchero, lo cual por cierto le costó mucho ignorar.

— Bien, tu lo quisiste así Jeon — salió de sus pensamientos al escuchar a Jimin y cuando sintió un fuerte pisotón en su pie que lo hizo gritar de dolor para tomar su pie soltando a Jimin en el proceso.

— Minnie — se quejó, pues si había dolido, y mucho.

— Oh, lo siento, ¿te dolió? — pregunto fingiendo preocupación.

Siete HermanosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora