La puerta se cierra a mi espalda, desde el interior escucho con claridad como es cerrada con llave. Golpeo la madera fuertemente para hacerme oír por encima de la música pero nadie es capaz de oírme. Comienzo a moverme inquieta por la habitación. Prendo la luz tras chocarme varias veces con algunos muebles.
Sin embargo, una vez que la electricidad hace presencia y se enciende la lámpara de techo -la cual tiene un aspecto un poco deplorable- descubro algo que me da arcadas al instante. No soy capaz de reprimir el contenido de mi estómago y acabo vomitando junto a la puerta.
Cuerpos. Cadáveres. Hay cadáveres colgados del techo, completamente ensangrentados; algunos con el rostro desfigurado, prácticamente irreconocibles; otros con extremidades faltantes y otros simplemente amontonados unos encima de otros.
La visión macabra y espeluznante que me producen me hace querer salir corriendo pero mi primer instinto es gritar. Grito tanto que siento que mis propios oídos acabarán explotando.
Una risa ronca y conocida resuena por la habitación, a tan solo unos pasos de mí. Me giro rápidamente intentando descifrar quién se encuentra aquí conmigo pero a pesar de tener prendidas las luces, los cuerpos colgados como si fuesen jamones, me impide ver muchas de las zonas de la amplia sala.
Sin embargo su voz se oye alta y clara, como si fuera no hubiese una fiesta ni la música estuviera a un volumen completamente perjudicial.
—No hace falta armar tanto escándalo —otra risa y una pausa que hace que se me erice la piel. Un sudor frío comienza a formarse en mi frente y noto como un par de gotas se deslizan por ella—Al fin y al acabo vas a terminar como ellos en segundos —después de decir eso, todo se envuelve en un silencio pesado.
Me cuesta respirar y cuando las luces se apagan, pierdo la poca cordura que me quedaba. Al no haberme apartado mucho de la puerta tan solo tengo que dar un par de pasos para alcanzarla. Esta sigue cerrada con llave desde fuera por lo que comienzo a golpearla con la intención de derribarla.
Obviamente, no funciona.
La empujo con fuerza con el hombro repetidas veces hasta que escucho como se quiebra el hueso. Un dolor apabullante me recorre el cuerpo y tengo que morderme los labios para no emitir un grito que alerte al desquiciado que está conmigo en esa maldita sala.
En ese momento no soy capaz de procesar nada de lo que ocurre y ni siquiera se me pasa por la cabeza que los golpes que ya había propinado a la puerta, lo han alertado. Solo quiero salir de ahí.
Mis planes se ven frustrados cuando siento un fuerte tirón en el pelo que me hace caer al suelo. El cuero cabelludo me arde debido a la fuerza con la que había sido jalado.
—No tan rápido, bonita. Esto solo acaba de empezar.
•✨🦋✨•
10 horas antes
El teléfono no deja de sonar a un lado de la cama. Lleva al menos veinte minutos así pero no me he dignado a tomar ni una sola de las llamadas.
Me hago un rollo con el edredón y escondo la cabeza debajo de este, aislando la melodía que sigue sin cesar.
He dormido realmente mal, y no tengo energías para nada. Las pesadillas me atacan cada vez que cierro los ojos, sin importar si estoy durmiendo o no.
Cada vez que mis párpados caen, vuelvo a estar en aquella casa de Sancerre, ahogándome con el humo, con un par de costillas rotas y entre los cadáveres de mis padres. Zenda no está en ningún lugar visible.
Puedo saborear la sangre en mis labios, junto al olor de la carne siendo abrasada. Las risas de las personas que entraron en casa.
Lo revivo una y otra vez. Siempre hay algo que cambia y me hace plantearme si realmente viví algo así. Parece real pero en ocasiones todo se difumina y veo escenas que no recordaba anteriormente.
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Las respuestas de la Luna
Mystery / Thriller¿Qué pasaría si de la noche a la mañana lo perdieras todo? Tal vez debamos preguntarle a Deva. Dev pensaba que lo tenía todo,que podría ser feliz, sin embargo todo lo que había logrado se vio destruido en tan solo una noche. Aquella fatídica noche...