9

5K 905 327
                                    

—Eres un jodido debilucho.

—¿¡Es en serio!?

—¿Por qué no solo lo golpeaste? Un imbécil como él eso se merece.

—P-pero... Es un señor mayor... —Y dale con lo mismo.

Tenemos un rato desayunando en mi lugar favorito (detalle que el mierdoso de Deku no sabrá nunca).

Luego de contarme literalmente como su, ahora ex, jefe lo acosaba me hizo confirmar que es digno del apodo con que lo bauticé.

Deku.

—¿Quieres decir que como yo soy mucho mayor que tú puedo acosarte hasta sacarte lo que yo quiera? —Mi estúpido instino me llevó a limpiar con mi pulgar una mancha de nata en la comisura de su labio inferior, llevandome a la boca el exceso de la crema dulce.

—N-no... —Parece que mi acción lo hizo avergonzar, bajó la mirada con sus mejillas sonrojadas (otra vez).

"Parecen dos tomates... Más bien, fresas"

—Tu problema se solucionaba con una denuncia y una buena paliza. —Su mirada seguía en el suelo.

"Éste... Algo no me dijo"

—¿Es solo por eso que te ibas a casar con él? ¿O hay otra mierda detrás?

El brócoli con patas dudó antes de asentir, dio un sorbo a la malteada de fresa y yo di un sorbo a mi café.

—Me amenazó con manchar mi historial laboral para que nadie me recibiera en ningún otro trabajo. Necesito el trabajo para las deudas y medicinas de mamá. Así que lo que tanto temí que pasaría finalmente va a pasar.

"Su cara... ¿Es una mueca de tristeza? Ugh"

—¿Qué estudiaste?

— Gestión empresarial. —Bingo, justo lo que buscaba.

—Bueno, jodido Deku. Es tu día de suerte. Necesito personal en la administración de mi negocio, me estoy expandiendo y estoy escaso de personal. —Sus ojos nuevamente recuperaron el brillo con que me miró por primera vez cuando entré a.. Agh, ustedes saben.

—¿¡E-en serio!? —Me limité a asentir, dando una mordida a un delicioso pancito.— ¡Muchas gracias, Bakugo-san!

Se puso de pie y me abrazó, haciendo que por la sorpresa soltara mi pan.
Mi jodido pan.

"Vivirás siempre en mi memoria... Leopoldo tercero"

Suspiré resignado y finalmente alimenté mi curiosidad, llevé mi mano a la mata de cabellos verdes, comprobando mi teoría: son suaves y de aroma frutal.

La campana del lugar sonó y sentí al inútil de Deku paralizarse.

"Tan cómodo que me estaba sintiendo..."

—¿Todoroki-kun? —No me digas que estamos hablando del mismo estúpido Todoroki.

Tiré de la oreja de Deku para obligarlo a soltarme, se quejó por mi acción pero así como muchas cosas en mi vida. No me importó.

Me levanté para darme vuelta y efectivamente era el mismo Todoroki.

—¿Que haces aquí, bastardo mitad/mitad?

—También es mi cafetería favorita. —Omití el que dijera "también" y finalmente solté al quejumbroso de Deku.— Midoriya, tu madre me contó lo que paso en la boda, el estúpido del viejo me puso trabajo extra y no llegué a tiempo. Pero de haberlo hecho yo mismo te hubiera robado...

Y algo en mis adentros hizo click.

—B-bueno... No te preocupes, Todoroki-kun. ¡Espera! ¡Ustedes ya se conocen?

El bastardo bicolor asintió.

—Promociono su negocio. Y de hecho quería pedirte un favor, Midoriya.

Llámenme metiche pero... No, jódanse, no me llamen metiche. Estoy dentro de la conversación y esto me concierne.

—¿Dime?

—Necesito un par de modelos extra para la siguiente línea de perfumes, y estaba pensando en ti. También tu, Bakugo.

—No, jódete.

—Recuerda que me debes una, Bakugo.

—Una mierda.

—¡Y-yo con gusto, Todoroki-kun! Necesito tantos trabajos como me ofrezcan. Bakugo-san me ofreció trabajo en su florería, ¿no es genial?

El helado con fresas andante me miró, arqueando una ceja. Su mirada lo decía todo.

"¿Bakugo amable?"

"Jódete"

—Hum, ¿chicos? ¿Soy yo o están hablando telepáticamente?

—Esa malteada te volvió más idiota de lo que ya eres, Deku. ¡Y me niego en aparecer en una puta revista superficial!

¿¡Que yo QUÉ?! [KatsuDeku]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora