Otra vez estas leyendo, me ignoras y siento que todo mi ser duele.
Llegaste a casa y nisiquiera me saludaste, mis ánimos decaen poco a poco, realmente no sé lo que va a pasar, si un día cruzaras esa puerta y jamás volvieras...
Antes solíamos ver la tv juntos, aunque realmente no eras fan de eso, me acompañabas. Ahora ni yo mismo quiero ver la tv, duermo casi todo el tiempo, no tengo apetito, no puedo recordar siquiera si es que he comido algo, y no tengo deseos de hacerlo.
¿Lan Zhan, ya no me amas?
Por que yo a ti si, desde el primer momento, desde la primera mirada, desde el primer abrazo, te ame.
Actualmente me siento solo, vacío y molesto, tengo mucho tiempo sin saber cómo se siente la felicidad, me pregunto seriamente ¿Acaso ya no me amas?
Sí eso sí te suplico que me dejes morir.
Te vi entrar por esa puerta y me pareciste tan vacío, un completo extraño, me ignoraste y me dolió tanto, qué no entendí realmente ni porque estaba aquí.
Trato de convencerme de que todo esto es un sueño, que volverás mañana a mis brazos, que seremos felices de nuevo.
Hasta hace unos días todo estaba bien, vivíamos de amor y de está felicidad, pero ahora ¿Qué nos está pasando?
-¿Te gusta esa chica de la oficina? -no hubo respuesta- por favor dímelo, no me molestaré, trataremos de manejarlo como lo que somos, esposos.
En la inexistencia de tus palabras pude encontrar respuestas, unas muy dolorosas que perforaron hasta lo último de mis entrañas.
Y quise negarme a mi mismo lo que veía.
¿Qué es lo que te impide decir siquiera "hola" al volver?
No importa lo provocativo que quiera ser aún no me ves, vuelves a casa del trabajo y me preguntó si realmente mi esposo volvió o se quedó y enviaron este cascarón que tiene tu porte, tu rostro, tu voz...
Tu hermano tocó la puerta hace un momento, sabía que era él , por que escuche su voz a través de la puerta llamarte, nunca contestaste, ahora me doy cuentas que no solo conmigo es que te comportas así, estoy realmente preguntándome ¿qué es lo que pasa contigo? ¿el problema es conmigo? ¿que te sucedió? ¿que te hicieron? ¿quién cambió o me quito a mi esposo?
-Wanji... -dijo tu hermano- abre la puerta, el joven Wei no te querría ver así.
-Tiene razón -dije rápida y desesperadamente- quiero al Lan Zhan que me ama de vuelta.
Pero con tu mirada perdida ante mis palabras, tengo la vaga sensación que jamás le volveré a tener.
Jamás tendré de nuevo a mi Wanji.
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La Historia de Un Suicidio.
RandomWei Ying narra día a día cada suceso que pasa antes, durante y después del suicidio que cambio su vida, incluyendo sus remordimientos.