The 100 [Bellamy y tú]

Capítulo 38

***

Narra Olivia.

El caballo empezó a moverse, Bellamy nos hizo una señal para que viniesemos.

Nos pusimos al lado de un arbol donde nos permitia poder ver a Finn sin que nos descubran.

-Se que teneis miedo, pero somos guerreros. Podemos con esto. -dijo Bellamy mirando a los hermanos-

-¿Como? -dijo el rubio-

-Atacando en equipo. -respondi-

-Cuando el vaya a por mi, Monroe va a por Finn. Cuando esté liberado, seremos cuatro contra uno.

-¿Que hago yo? -preguntó el rubio-

-Intenta no morirte. -respondio Bell-

-Bellamy, dejame a mi hacerlo.

Bellamy me miró.

-El me salvó la vida, dejame a mi salvarle ahora.

-Te va a matar si algo falla.

-Chicos, debeis de decidiros ya. Se estan yendo.

Bellamy me miro y asintio.

-Ten cuidado. -susurró-

-¿Listos? -los tres asistieron- ¡Uno, dos, tres!

Me levanté y fui corriendo hacia el caballo.

-¡Eh! -grite-

El terrestre se giró al igual que Finn.

Finn se sorprendió al verme.

Giré un poco mi cabeza y vi que Monroe no estaba.

-¡Olivia, largate de aqui!

No se quien dijo eso.

De repente el terrestre giró el caballo y empezo a correr hacia mi, haciendo que Finn cayera al suelo y fuese arrastrado por el caballo.

Apunte con la lanza hacia el terrestre, pero cuando se la tiré la esquivó.

El terrestre me metió un puñetazo haciendo que cayera al suelo debil.

Bellamy salió de entre las hojas y empezo a pelear a muerte con el terrestre.

***

Narra Clarke.

Llegué al comedor donde se encontraban Monty y Jasper. Ellos estaban haciendo el tonto como siempre.

-Eh, ¡Clarke! -dijo Jasper-

-Sentaos y finjid que os alegráis de verme. -dije sentandome-

-Es que nos alegramos de verte. -respondió Monty mientras se sentaba- Tienes que probar el pastel de chocolate. -dijo mientras miraba jugetonamente a Jasper-

Monty me acerco su plato sin despegar la mirada de Jasper con la suya.

-Esta delicioso. -añadio Monty-

-Vale... Esta te la guardo. -dijo Jasper en modo de venganza-

Ellos siempre parecen unos críos, almenos desde que los conozco. Son tal para cual.

-No me voy a comer su comida. -dije mirando al viejo-

El abuelo estaba sentado en otra mesa mirandome con su mítica sonrisa penetrante.

El, al notar que le estaba viendo retiró su mirada, yo hize lo mismo.

-Mirad. -dije señalando el mapa- Nos han dado un mapa sin salidas. Contadme todo lo que habeis visto. Cada habitación, cada pasillo, cada salida.