Un nueve de Diciembre del 2014 yendo a una firma de discos de Abraham, estaba emocionadísima por que al fin iba a abrazarle.
Iba con mi amiga Paola que obviamente también es Abrahamer. Después de unos minutos oyendo un ruido de motor detrás nos encontramos con que una furgoneta negra con los cristales tintados nos seguia, por eso cada poco íbamos mirando para atrás y a veces corriamos un poco, pero con eso no cambiabamos las cosas ya que no los conseguíamos despistar.
-¿Qué hacemos Andrea?, dudo que los vayamos a despistar.-Me dijo Paola con tono de asustada.- Ya se han metido hasta por calles en dirección contraria...
Yo la corté de golpe por que tuve una gran idea y por que no se me ocurren muy a menudo ideas tan geniales.
- Ven Paola me sé un lugar en el que hay muchos bares con terraza - Dije muy contenta de mi idea- y donde no podrán pasar.
Seguimos corriendo con las fuerzas casi agotadas.
-Aguanta Paola estamos cerca,- le dije para intentar animarla un poco- es al final de esta manzana a la derecha. Llegamos al lugar y pensabamos que los habiamos despistado.
Pero escuchamos el motor de un coche apagarse.
