#5

27 3 22
                                    


Naida

¿Invitada a una fiesta?

Asher ya se a ido, la pequeña brisa que a quedado de la tormentosa lluvia sigue trayendo consigo algunas gotas frías de agua.

Mi abuela me mando a bañar y ponerme mi pijama para que luego baje a explicar el porque llegue tan tarde. Termino de ponerme mi pantalón de algodón color gris y estoy por bajar las escaleras.

Que nervios, Por favor ángeles, apiádense de esta pobre alma.

Mi abuelo esta sentado en unos de sus sofás viendo la tele, con una vaso de chocolate caliente en las manos.

Me escabullo hasta llegar a la cocina para poder hablar primero con mi abuela, que esta poniendo leche en uno de las tazas (mi favorito es leche con chocolate) se gira y me ve, sonríe tan hermosamente mientras deja la taza a un lado y habré sus brazos y camino rápido hacia ella para recibir su abrazo.

―¿El abuelo esta muy enojado cierto?―pregunto apoyando mi mejilla sobre su hombro.

Su cabello suave me hace cosquillas que me hacen sonreír, su abrazo me reconforta tan bien que siento que todos los miedos se van.

―Estaba muy preocupado porque no llegabas ―dice mientras su mano calientita acaricia mi espalda. Se separa un poco y me toma de los hombros― Deberías ir a disculparte, vamos anda ―asiento y me doy la vuelta para irme― Mi niña tu chocolate ―me regreso a tomarlo y me voy a la sala.

Me siento en un sofá a un lado de mi abuelo.

―Yo.. yo lamento haberlo preocupado, nunca fue mi intención―mi mirada esta fijada en mi chocolate, escucho como apaga le tv y pone su atención en mi.

―Te dije que si necesitabas ayuda, me podías llamar y yo iría por ti ―deja su chocolate a un lado, su voz se a calmado un poco.

―Si lo recuerdo, pero... me estaba divirtiendo ―mi tono de voz baja un poquito y me pongo mi dos manos alrededor de la taza.

―¿Con ese muchacho?

Mi boca se cerro sin saber como responder ¿Cómo yo podría hablarle a mi abuelo del chico que me gusta? El se da cuenta de mi silencio y sonríe.

―Bueno bueno, no voy a tocar ese tema ―Toma de nuevo su chocolate―Pero no vuelvas a hacer eso te quito la guitarra y nada de salidas―advierte.

 Ay no con eso no.

―De acuerdo ¿Entonces estoy disculpada?―levanto la mirada para verlo con una sonrisa plasmada en mi rostro.

―Ya hable.

Me levanto y voy a su asiento y lo abrazo.

―Gracias Gracias ―le repito abrasándolo un poco fuerte.

Me separo y camino a tomar uno de los discos que tiene mi abuelo encima de la repisa de madera, tomo mi música favorita y la pongo en el reproductor de música.

Las primeras notas de Stand By Me de Joseph Vincent se escucha en toda la habitación, me acerco a mi abuelo estirándole la mano, de reojo veo a mi abuela que esta en el umbral de la puerta de la cocina viendo todo mientras sonríe, viendo como saco a mi abuelo a bailar en la mitad de la sala.

―Vamos señor Davis me concede esta pieza

―Claro señorita, como usted lo desee ―Toma mi mano y nos empezamos a mover tal y como lo he aprendido desde pequeña cada que bailaba con el.

La noche se resume en bailes y risas, el ver como mi abuelo invita a mi abuela a bailar con la excusa de recordar sus viejos tiempos, se ven tan bien juntos que piensas que algún día tendrás un amor tan hermoso como el de ellos, que duraron tanto tiempo aun después de perder a su hijo, ellos buscaron apoyo en el otro.

KalopsiaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora