A NIGHTMARE ON ELM STREET: THE END OF THE NIGHTMARE

En la oscuridad - El fin de la Pesadilla

La atmósfera que cubría el bosque estaba densa, las sensaciones extrañas y negras, Sam estaba esperando algún movimiento de su verdugo en cuanto ella le respondió asertiva a su petición, en cambio Krueger, la examinaba detenidamente, se rió sarcástico y dijo:

- ¿Acaso la señorita Sam trama algo? - preguntó, Sam miro hacia abajo maldiciendo - No te aconsejo que hagas alguna locura, Sammy - continuó él moviendo su dedo de forma negativa.

Sam se mantuvo firme esperando algún truco clásico de él, sin embargo esta vez Krueger simplemente desapareció, Sam frunció el ceño hasta que vio una especie de sendero que se formó en la tierra, ella lo siguió hasta que dio con una escuela, en el edificio pudo notar el nombre, era su escuela actual, solo que como el otro sueño, estaba demacrada y llena de basura, entró y noto todo normal, las personas que estaban ahí no notaban su presencia, ella se aventuró por los pasillos, esperando encontrar algo o alguien, se encontró con Nancy junto a un chico, escucho que se llamaba Quentin, y luego en segundos los vio desvanecerse.

Escuchó un grito desgarrador proveniente de una sala cercana, corrió hasta allá mientras todos se acoplaban para ver qué había sucedido, todos se espantaron, había ocurrido un suicidio o más bien un homicidio. El chico que estaba tirado en el piso tenía una enorme herida en su cabeza y varios rasguños en su espalda, ella se acercó al cuerpo, lo toco con el dedo pero el chico agarró su mano fuertemente, Sam se espantó y grito, el chico la acerco hasta él y le dijo muy cerca de su rostro...

- Corre.

Inmediatamente todos los que estaban viendo desaparecieron, la escuela se remecía con fuerza, Sam corrió a la salida pero ya no estaba la puerta, de hecho, ya no estaba en la escuela, ahora estaba en su antiguo hospital. La respiración de Sam comenzó a ir más rápido, estaba asustada, esperando cualquier cosa que viniera por ella, miraba para todos lados, girándose bruscamente para evitar cualquier sorpresa, caminó un poco y en una esquina, vio a unos dedos asomarse por la puerta, la cosa que salió de allí hizo que Sam comenzara a retroceder lentamente, el ser parado frente a ella era humanoide, negro y de ojos rojos, se le escuchaba gruñir, Sam retrocedió lento hasta que el ser la vio y corrió hasta ella de un manera horrorosa y repulsiva, Sam se tropezó, se levantó en seguida para echar a correr como nunca.

Por los pasillos, se encontró con diversas caras que ella recordaba, sus antiguos compañeros de hospital, ella corría mientras los pacientes se escondían de la cosa que estaba persiguiéndola, en un momento las puertas desaparecieron y dejaron paso a un extenso pasillo y de la nada comenzaron a salir manos de las paredes tratando de detenerla, Sam se defendía, lamentablemente, las manos la agarraron con fuerza haciéndola caer, ella que vio al espectro acercarse trataba de pensar rápido, y se le vinieron a la mente los sueños lúcidos...

- Vamos, Sam, concéntrate- se dijo con los ojos cerrados, levanto su mano para poder atravesarla con su dedo, y al abrir los ojos su anhelo de desesperación se cumplió. Al ver que estaba en un estado de lucidez óptimo, se levantó para acercarse hasta el espectro, con su mano lo tocó y este desapareció en una estela de luz blanca y un grito violento.

Sam sonrió victoriosa, para después desear estar en otro lugar, se vio en la sala de calderas, salió hacia el exterior y observo un lago que no había visto antes... Y se dio cuenta que estaba teniendo una visión...

Una niña jugaba cerca de la orilla, estaba acompañada de su madre, en un momento todo estaba en orden hasta que se vio una enorme llamarada salir de su pequeña cabaña, la madre grito un nombre entre sollozos al ver que su casa estaba en llamas.

-¡¡MADDIE!!- grito la pobre mujer acompañada de su hija que solo miraba estupefacta, Sam se acercó hasta la casa esperando usar su "poder" para no quemarse, logró entrar, viendo que no había nada que la pudiera dañar, se apresuró para subir hasta el piso de arriba, y lo que vio la hizo arrepentirse de haber decidido entrar...