Dia 6.

174 37 7
                                    


Aliados a la bolsa

Lo que pasó después es que le partí la nariz a Patrick y salí corriendo sin parar hasta otro país en donde nunca me encontraron. Me volví musulmana y viví escondida como una rata el resto deー

Ok no. Eso no pasó.

Lo que pasó es que mi padre me dio una mirada de; Reza muy fuerte está noche Elizabeth.

Se fue a su camioneta para luego arrancar, yo me zafe de Patrick y me fuí a la residencia sin cruzar palabra alguna.

Me tiré a la cama (Ya en pijama) mirando al techo como si este tuviera alguna respuesta... Una notificación llegó a mi teléfono y me mordí el labio inconscientemente.

Jess

Dale tiempo, tiene que calmarse, sabes cómo es, no era el tiempo. Te amo 11:26pm.

La verdad no estoy nerviosa por lo de que Patrick de me insinuara descaradamente (Por lo cual lo voy a matar) sino porque... ¡Mi padre no estaba listo para eso!.

Escucho la puertas de mi habitación y ya me preparo para la cara de perrito regañado de Katherine. Pero en vez de eso veo una cara de perro con parálisis pasar por la puerta. Bufo y me volteo dándole la espalda.

-¿Estas molesta chica cuervo?.- Cierra la puerta y se sienta en la orilla de la cama.

- Noo, estoy súper feliz por lo que pasó.-  Uso sarcasmo.

- Creo que le cai bien a mi suegro.- Comenta.

-¿Katherine te dejo entrar?.- Me volteo.

-¿Ah?.- Pone cara de idiota.- La imbécil de tú amiga no sabe que estoy aquí, entre y ya.- Sube y baja los hombros sin darle importancia.

- Ah, ya veo... ¡Entonces lárgate de aquí!.

- Nah.- Se echa para atrás y atrapa mis piernas con la mitad de su cuerpo.- Aquí huele bien, y tú estás aquí.

- Y ti istis iqui.- Pongo una voz aguda.- Ojalá te dé sida.- Me cruzo de brazos.

Él ríe-¿Y si follamos?.- Fue al grano.

- Primero dejo que un perro lo haga antes de hacerlo contigo.- Me siento a orcadas.- Ahora largo.

- Nop.- Y en eso le di una patada en el brazo, él me miro como si no lo creyera.

- Ahora.

-¿Por que siempre eres así?.- Me mira con cautela con una leve sonrisa

- Porque te odio.

- Nunca te he hecho nada malo Elizabeth.- Me dió un escalofrío ya que es la primera vez que dice mi nombre.

- Tú sólo me quieres follar.

- Y mentira no es.- Me sonríe de oreja a oreja.- ¿Pero quien dice que no podemos ser amigos antes?.

- Nunca pasará.

Suspira dramáticamente.- Elizabeth.- Se sienta en la orilla de la cama.- No eres ni la primera y tampoco la última que se resiste a mi, es cuestión de tiempo, sólo eso.

Horny BoyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora