𝐓𝐎𝐃𝐎𝐒 𝐒𝐎𝐌𝐎𝐒 𝐔𝐍 𝐒𝐄𝐂𝐑𝐄𝐓𝐎 𝐏𝐄𝐋𝐈𝐆𝐑𝐎𝐒𝐎. ~Edward Nygma~

Capítulo 29: UNA PROPUESTA TENTATIVA.

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Habían pasado aproximadamente 8 meses desde lo sucedido en Arkham. Lo que Jim había prometido; jamás lo cumplió. Podría ser una estupidez pero te importaba si él se encontraba bien. Durante esos meses, saliste fuera del país junto con el niño Wayne. Alfred creyó que era buena idea que salieras de aquella nublada y triste ciudad. Unos meses fuera de Gotham te alineó un poco,no demasiado pero si para tranquilizar y descansar un poco.
Antes de salir de Gotham, Bruce Wayne te había otorgado un poco de su ayuda para que Barnes aceptara que regresaras a la comisaría,ya sea como oficial o detective,pero ese hombre era demasiado terco así que solo te quedó agradecer a Wayne.

Lo que pocos sabías desde tu llegada a Gotham en esos momentos era que Fish Money estaba viva. Ella se encontraba en el autobús que escapó aquella vez de Arkham.

Al llegar a la mansión Wayne, rápidamente regresaste a tu departamento no sin antes agradecerles a ambos.
Querías sentir nuevamente el frío de aquel lugar traspasar tu piel y tal vez un poco de vino quemar tu garganta. Sabías de un club a unos minutos de tu departamento así que saliste directo hacía ahí.

Tocaste el fino suelo de aquel elegante club mirando a tu alrededor hasta llegar a la larga y minimalista barra de tragos. Mientras esperabas tu bebida, alguien se acercó a tus espaldas susurrando algo.

— ¿Qué hace una niña tan linda aquí?
Preguntó la alta y delgada rubia a tus espaldas. Sabías de quién se trataba pero aún así no te giraste.

— ¿Por qué no salir y beber algo en este elegante lugar?
Dijiste.
Sentiste como la mujer se sentó a tu lado mirándote fijamente. Tu trago fue entregado casi al instante en el que la rubia se colocaba a tu lado.

— No lo sé. Creí que mi ex se molestaría si se entera que estás aquí.
Admitió riendo un poco. Tu frunciste el ceño.
Tus dedos rosaban la orilla de tu bebida mientras mirabas a la mujer.

— ¿Jim?
Preguntaste. La mujer asintió sonriendo. — Por Dios Barbara,¿Crees que yo y el estamos juntos?
Preguntaste extrañada.

— Espero que no. No quiero asesinar a una niña.
Dijo sonriendo de oreja a oreja. Tu reíste un poco por aquella respuesta.

— Por Jim.
Brindaste y tomaste tu trago de un solo sorbo lo que provocó que quemara tu garganta. Era algo nuevo para ti pero aún así te gustó.
Barbara había pedido la misma bebida que tu y brindó contigo.

— Por Jim.
Un rápido trago provocó que al igual que tú,su garganta quemara.
La rubia se levantó de su asiento y se distanció unos 3 metros sobre ti.
Seguiste pidiendo tragos mientras lo tomabas tranquilamente. Alzaste un poco tu mirada hacia Barbara pero era ahora ya no estaba sola. Oswald se encontraba ahí junto con Butch. El sonido de unos tacones resonaron a tus espaldas y pasaron por tu lado. Giraste tu cabeza un poco para observar y saber que era Tabitha.
Sacaste lentamente tu arma de tu chaqueta ya que probablemente sucedería algo pero no fue así.
La pelinegra y la rubia aún seguían hablando con los hombres. Butch caminó en dirección a la barra y se sentó a tu lado aún sin conocerte. Selina pasó a tu lado saludando solo con su mirada y luego se dirigió al lado de Butch.