¿Una Weasley? (Harry Potter)

¨40¨

Después de la cena nos fuimos a dormir, bueno yo no podía dormir después de todo de lo que me había enterado. No había nada que marcara la hora, pero suponía que eran como las tres.

Me bajé de la gran cama y salí de la habitación, recordé lo que me había dicho Blippi;  tenía que caminar por toda la casa para llegar a la cocina, caminé los gigantescos pasillos, bajé las escaleras, pasé la sala, el comedor, el salón de baile hasta que llegué a la puerta de la cocina y entre. Había varios elfos trabajando no lo quise molestar así que tomé un vaso e intenté servirme agua, pero una voz me interrumpió

-Ama Malfoy, permita que Blippi lo haga por usted- miré hacia abajo para encontrar a Blippi

-Gracias, Blippi- le entregué el vaso, él me sirvió agua y me lo entregó -Muchas gracias-

-Es un honor para Blippi, ama- dijo moviendo sus orejas

-¿Y no descansan?- le pregunté mientras tomaba agua

-A veces, nos turnamos para descansar-

-Oh, entiendo... La cena estuvo deliciosa- me subí a la barra de la cocina

-A Blippi le alegra que a la ama Malfoy le haya gustado la cena- movió otra vez las orejas -A Blippi casi nunca lo felicitan- moví los pies de abajo

-¿Ah, no?- él negó -Bueno, yo si lo haré, todos los días, cada comi...- otra voz me interrumpió

-Lyra, no hablamos con los elfos, princesa- era la voz del seño Mal... de mi padre me interrumpió, bajé de la barra de un salto y deje el vaso en ella

-Lo lamento, yo no lo sabia- dije apenada, Blippi se fue asustado. No veía nada de malo hablar con ellos

-Está bien. ¿Qué haces despierta?- estaba vestido con un pantalón negro y una camisa a juego que la cubría una bata la cual se veía muy fina

-No podía dormir y bajé por un vaso de agua, espero no le molesté- dije tímidamente, él soltó una leve risa

-No tranquila, cariño... ¿Ya te dio sueño?- me sorprendí por su tono, pero aun así negué -Bueno entonces, acompáñame- me tomé la poca agua que había en el vaso y salimos de la cocina en total silencio, nos detuvimos al llegar a una puerta 

-L.N.M.B- pronunció papá haciendo que la puerta se abriera

-¿L.N.M.B?- pregunté confundida

-Es la contraseña; Lyra Narcissa Malfoy Black- Narcissa, es era mi verdadero segundo nombre. Entramos a la habitación y todo estaba adornado para bebés, sin dejar el estilo de la mansión Malfoy

-¿Era mi habitación?-

-Sí, lo era. Cuando tu madre se entero que te tendríamos se volvió loca, al otro día estábamos comprando todo lo necesario, es la única habitación que pintamos nosotros mismo- soltó un risa, el estaba sentado en un sofá, yo estaba caminando por toda la habitación -, incluso Draco contribuyó- me giré a verlo confuso, ¿Draco haciendo algo ¨para elfos¨? -¿Ves esa mancha de ahí?- señaló una pared que tenia una mancha negra que sobresalía entre las paredes grises

-¿Draco lo hizo?- el asintió, la mancha tenia una forma como de...¿un perro?

-Ese día termino lleno de pintura negra, a tu madre casi le da un infarto cuando su cabello se volvió negro por la pintura- ambos reímos -Y su ropa, a partir de ese día a tu madre no le quedaron ganas de volver a vestirlo de blanco- reímos otra vez, seguí viendo las cosas hasta que algo llamo mi atención

-¿Qué es esto?- señalé el aparato que tenia como un vidrio, él puso los ojos en blanco

-Tu madre me obligó a ir a un centro comercial muggle a comprarte ropa, yo no quería, pero ya ves ella tiene cierto poder sobre mí- me reí -Eso es una de las cosas que trajo de la tienda que vació, no sé para que es y no sé si quiero saber, mejor pregúntale a ella-