15. Miedo

121 16 12
                                    

Jongho termino por dormirse de nuevo, Yunho sonrió mientras lo tenía en su espalda, cargándolo mientras caminaban. Había estado durmiendo mucho y Yeosang no quería decirle la razón, supuso que era causa de Hongjoong.

Tengo una pregunta— Yeosang al fin hablo, después de mucho tiempo, las flores se habían detenido hace bastante, y parecía que habían robado la energía de Jongho quien termino cayendo en los brazos de Yunho para volver a dormir.

¿Cuál?— Yunho sonrió sabiendo que todo estaba bien, esas flores habían traído un extraño sentimiento a Yeosang quien de inmediato retomo el viaje, por suerte ahora que habían desaparecido todo parecía mas tranquilo. Pero los muñecos se veían más cansados, Yeosang de repente tenía que parar para respirar y Jongho se aferraba con fuerza como sino quisiera dejarlo ir.

¿Tuviste algo con Jongho?— eso hizo sentir nervioso a Yunho— no sé... Tal vez una relación mas allá— miro al muñeco de cabellos rojos dormir tranquilo, sin importarle en lo más mínimo el estar siendo llevado por Yunho.

Le conté a Mingi parte de la historia— suspiro, ahora necesitaba a Mingi quien se había convertido en un gran soporte. Después de unos momentos supo que si quería ayudar a Jongho tenía que volver a contar su pasado.

Así que en realidad es tu muñeco— Yeosang escucho paciente, la historia parecía demasiado, Yeosang no creía en las coincidencias ni en el destino, pero en ese momento pensó que tal vez algo tenía que ver— esto parece más complicado de lo que creí— se despeino su cabello sin saber como podría ayudar.

Tengo miedo... Cuando lo vi de nuevo pensé que correría para abrazarme, después de todo éramos compañeros de aventuras, pero solo me miro para pedirme ayuda porque Hongjoong estaba herido— recordó aquel estúpido reencuentro. Había deambulado durante tanto tiempo, y solo se acerco por el fuerte ruido, fue suerte que estuviera por ahí, en cuanto vio a Jongho se acerco con una gran sonrisa, pero se asusto cunado lo vio con las manos llenas de sangre, pensó que había matado a ese alguien que cargaba, cuando le pidió ayuda supo que ese no era su Jongho— decidí no decir nada, no tenía el derecho de hacerlo sentir mal por no recordarme así que decidí fingir, pero como veras eso ya no esta resultando— sostuvo mas fuerte los pies de Jongho sin darse cuenta, suavizo el toque cuando este removió inquieto.

Entonces tu lo forzaste a olvidar...— comprendió la situación— debes decirle la verdad probablemente ya no sea tu muñeco, pero recuperará sus sentimientos y recuerdos— sonrió— así será más fácil resolver su error de fábrica— ya sabía como ayudar a sus amigos aunque debían poner de su parte, en especial Yunho para que eso no volviera a ocurrir— supongo que estuviste a punto de morir porque es el único momento en el que se me ocurre que Jongho comenzó a fallar— era complicado, la fallas venían desde antes solo que a veces se necesitaba un detonante para explotarlas, en este caso el detonante para Jongho fue que Yunho lo obligara a olvidar de forma inconsciente.

Algo así... Cuando todo inicio yo estaba con mis padres, debo decir que a mi papá no le gustaba mucho que estuviera pegado a Jongho entonces me hizo dejarlo en la casa— suspiro, como quería regresar en el tiempo y llevarse a su preciado Jongho, en vez de obedecer— estábamos de viaje cuando todo se destruyo, el carro se volcó... Mis padres murieron— su mirada se volvió sombría, todavía recordaba aquello como si hubiera pasado ayer, además de que escuchaba los gritos de su madre— sobreviví gracias a que el impacto fue menor para mi, me salvo mi mamá prácticamente— sonrió, había despertado descubriendo que estaba colgando, el cinturón lo había detenido además de que el asiento de su madre lo detuvo, fue suerte, si ese día hubiera decidido sentarse en medio o del lado de su papá hubiera muerto sin lugar a dudas.

Así que es eso—Yeosang toco su barbilla antes de dirigir su mano a la espalda de Jongho, sin ponerle mucho peso la acaricio— pobre, seguro sintió tu angustia y dolor, el dolor de la muerte sin haber muerto— de solo imaginarlo le dolía el cuerpo, él que conocía la sensación de morir podía decir, que las muertes violentas eran de todo menos agradables.

Sweet Little DollsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora