Posdata: Te amo. #Extra

🐝 Preparativos 🐝

No tenía otra idea de a quienes podría invitar, que no fuera la manada. Creo que podrían ser suficientes para pasar las vacaciones mas unidos.

-¿Crees que ellos quieran ir? - Le pregunté mientras me metía un pedazo de waffle a la boca.

-Aún no los comas - Me dio un manotazo suave antes de que pudiera comer otro pedazo - Yo pienso que si, ninguno se puede negar a unas vacaciones -Se encogió de hombros.

-Quizá tengan planes - Dudé.

-No creo, no perdemos nada con invitarlos - Ahora había sido él, quien tomo el pedazo sobrante de waffle - Pero antes de decirles ya debes tener el lugar y la fecha.

-Creo que será mas emocionante si nos vamos sin ningún plan - Balbuceé - Pararnos en la primera playa que veamos, sea la hora que sea y al día siguiente seguir nuestro viaje a la próxima playa hasta quedar totalmente fuera de Los Ángeles... - Suspiré - Mientras que el resto lo vamos improvisando.

-Un viaje con mucha adrenalina entonces sería... - Mordió una orilla de otro waffle para después dame lo que restaba - Después de todo soy justo - Sonrió mientras sacaba los últimos waffles del fuego.

Estaba en un punto en donde no tenía algo preocupante en que pensar, todas las mañanas sólo éramos Leo y yo en una burbuja de platicas interminables. Cada chiste, anécdota o pensamiento que él tuviera, era como un click donde mi día mejoraba, podría llegar a ser mas ingenuo que yo, que quizá por eso jamás me cansaba de su compañía.

Prácticamente él vivía en mi casa y yo en la suya, nos visitábamos para desayunar, comer y cenar, a excepción de los domingos que también a dormir.

Recuerdo que la primera pijamada donde se quedó en mi casa, no sabíamos como dormiríamos. Así que optamos por quitar la mesa de centro para poner mantas en la alfombra mas nuestras almohadas y una sabana de extremo a extremo para que fuera como una casa para acampar.

Todo se veía tan infantil que me hacía disfrutar mas de ese momento porque cuando era niña no siempre hacía pijamadas con Teo, y tampoco lo viví con Aidan. Así que Leo era como esa lampara de genios donde podías pedir lo que quieras y se concedía sin tan siquiera tener idea de que tú lo anhelabas.

[FLASHBACKS]

-¿Y bien? - Frotó sus manos en sus piernas - ¿Qué se hace mas en estas pijamadas?

-¿No habías tenido una? - Fruncí mis cejas.

-Tuve demasiadas, créeme, pero eran muy diferentes...

-¿Cómo eran? - Crucé mis piernas en forma de indio para ponerle atención.

-Después de cada partido, beber hasta quedar inconscientes, terminar durmiendo en el suelo o en los sofás y al día siguiente despertar con el mejor dolor de cabeza que podías sentir en ese entonces... - Suspiró sentimentalmente al recordar esas épocas suyas.

-Podríamos recréalas pero no hay buenos recuerdos con el alcohol en esta casa, así que mejor lo omitimos.

-Mhm... omitida queda esa opción.

-Lo que si podemos hacer, es ponernos...

-Ay... no... - se dejó caer de espaldas al saber a que me refería.