Un juego en el que decidió entrar Jeon Jungkook aquel chico de 19 años hijo de un padre adinerado que siempre obtenía lo que quería, siempre quería ganar en todo, por ello es que termina haciendo una interesante apuesta con su hermanastra Jisoo.
Jungkook y Jisoo fueron de visita a casa de su tía Young, cuando llegaron cada quien se fijó un rumbo diferente, Jungkook tenía muchas ganas de ver a Taehyung, no sabía el porqué tenia tanta ansiedad por verlo, pensó en ir a buscarlo a su habitación y tal vez charlar un poco con él, se acercaba la hora de la comida y tal vez podían comer juntos, era extraño para él, nunca se había sentido tan nervioso, se encontraba en la biblioteca personal de su tía, le agradaba mucho ese lugar y cuando tenía ganas de estar solo se encerraba en ese lugar, se acercó a uno de los ventanales para mirar al exterior, hacía un buen clima, el cielo estaba despejado, el jardín se veía precioso con ese césped verde y los rayos del sol colándose entre los árboles, mientras apreciaba el jardín, notó que del otro lado se encontraba Taehyung sentado en el césped leyendo un libro, mientras e recargaba en el tronco de un árbol, le pareció una imagen digna de fotografiar, se veía perfecto, llevaba puesta una boina color café, con un atuendo que consistía en una camisa blanca, chaleco verde y unos pantalones en color café se veía tan tierno, su belleza le parecía demasiado irreal, podía quedarse horas mirándolo leer, incluso recordó que en una de las habitaciones había visto unos binoculares, y corrió a buscarlos, no demoró mucho en encontrarlos y regresó hacia aquel ventanal para seguir apreciando a Taehyung, estaba tan ensimismado en lo que hacía que ni siquiera notó que Jisoo había entrado.
-¿a quien espías?- la peli negra se acercó y sin previo aviso le arrebató los binoculares a Jungkook a lo que él solo rodó los ojos e hizo una mueca de fastidio.
Jisoo se encontraba observando al castaño y notó que él derramaba lagrimas mientras continuaba con su lectura.
-aaawww al pobre niñito sentimental le conmovió la lectura- se burlo la peli negra mientras observaba, cosa que al peli negro termino irritándolo y le quitó los binoculares con hostilidad, y aquel gesto Jisoo no lo pasó desapercibido.
-¿que mierda te traes Jungkook? - pregunto alzando una ceja mirándolo fijamente, dandole una mirada escudriñadora...
-nada- respondió tajante mientras evitaba mirarla a los ojos.
-¿te esta comenzando a gustar cierto?- musitó con voz fria mientras fruncía la mirada y el peli negro no pudo ocultarlo más.
-¿quieres la verdad?- aquella pregunta que hizo la peli negra fue suficiente para que su hermanastro mandara todo a la mierda y terminará por decir la verdad...
- Si, me gusta...y mucho, pero no soporto que sea tan mojigato, lo curioso es que esa parte de él es la que me trae loco, ¿contenta?- respondió con hastío mientras se dirigía a la entrada, quería huir de ahí, jamás había compartido sus sentimientos con una persona y mucho menos con Jisoo, era peligroso para el ya que ella usaría eso para hundirlo, ni siquiera notó la cara que ella había puesto, quedo totalmente estupefacta ante lo que veía
-el... me hizo sonreir- Jungkook con esa última confesión, se sintió aun mas extraño, no entendía porque seguía diciendo aquellas cosas frente a su hermanastra, ella era la menos indicada para confiar ese tipo de cosas tan personales y tan preciadas para él...
Tan solo recordar aquella ocasión cuando fueron al asilo y Taehyung lo hacia reir con sus extrañas muecas y su adorable comportamiento, le llenó el pecho de calidez pero tambien de incertidumbre.
-¿y entonces asi perderás tu apuesta?- agrego la pelinegra mientras se acercaba a él sacándolo de sus pensamientos mostrando una sonrisa ladina, y llena de satisfacción ya que su juego se tornaba aún más interesante, la confesión de Jungkook para ella fué como si le hubiese entregado su corazón en una bandeja de plata y ella lo haría picadillo con una daga filosa y terminaría dándoselo a las hienas de cena, Jisoo sin duda disfrutaría mucho del desenlace de todo esto...
-yo no perderé la apuesta, es solo que está tardando un poco mas de lo esperado- Jungkook respondió intentando esconderse de nuevo tras su típica mascara de soberbia y su porte de "macho alfa" y sin sentimientos, Jisoo se acercó acortando aún más la distancia entre ambos, acercándose peligrosamente a sus labios, mirándolos fijamente tentandolo a que terminara con ello de una vez por todas...
-¿puedo montarme en mi nuevo auto para ir a dar una vuelta, hermanito?- el peli negro chasqueó la lengua y rio socarronamente.
-en lo único que te vas a montar cariño... será en mi verga... grabatelo muy bien Jisoo, ahora si me disculpas, tengo asuntos muy importantes que resolver, permiso- el peli negro rió falsamente y se retiró de aquel lugar sin decir más, dejando a Jisoo demasiado molesta y con ira retenida.
Jungkook se sintió expuesto, patético, no podía permitirse perder, ni ante Jiso ni ante nadie, no iba a dejar que sus estúpidos sentimientos lo cegaran, el siempre conseguía lo que quería, y no le importaba si alguien salía lastimado por ello, asi era el y nunca cambiaria, Kim Taehyung será mio.... Caminaba por el jardín repitiéndose aquellas palabras a si mismo, mientras se dirigía directamente hacia donde se encontraba el castaño.
El castaño seguía perdido entre los párrafos de su libro hasta que notó la figura altiva del peli negro que estaba a unos cuantos pasos de él, no dijo nada, solo se acerco y después se arrodilló para estar aún mas cerca, él le sonrió dulcemente y el peli negro son decir mas se inclinó y le dio un beso en la mejilla derecha, despues otro beso en la mejilla izquierda muy cerca de la comisura de sus labios, Taehyung pensó que su comportamiento se estaba tornando demasiado extraño, pero no tuvo tiempo para reaccionar ya que Jungkook poso sus labios sobre los de él, no podía creer que él lo hubiese hecho, no sabia porque pero correspondió aquel toque, que comenzo a tornarse aún más necesitado, sus labios danzaban con ansia, saboreándose y deleitándose del sabor de sus salivas mezcladas, era embriagador, Jungkook comenzó a meter su mano por debajo de la camisa de Taehyung, cosa que lo alarmó, y terminó por empujarlo bruscamente
-lo siento- musitó el pelinegro sintiendose culpable por lo que había hecho...
-Yo tambien lo siento- Taehyung seguía con el rostro enrojecido y con demasiada molestia invadiéndolo, el peli negro se veía frustrado, se levantó pensando en irse pero se detuvo en seco, estaba demasiado harto y se estaba cansando de que Taehyung no cediera si quiera un poco.
-¿sabes que?... ¡no! ¡no lo siento, ni me arrepiento!-
-crei que solo seriamos amigos- hablo Taehyung con voz indiferente tratando de saber a que demonios jugaba Jungkook
-no lo resisto, no puedo embotellar mis sentimientos como tu- inquirió el peli negro con frustración -¿entonces con eso me estas diciendo que no sientes absolutamente nada por mi?- continuo mientras apretaba los puños comenzando a hiperventilar como fuese a hacer una rabieta.
-yo, si siento algo por ti- Taehyung confeso mostrándose un poco dudoso y temeroso de sus propias palabras
-¿entonces que pasa contigo? parece que tienes esposo o estas casado con Jesus-
-eres muy injusto- reprochó Taehyung demasiado indignado al ver la conducta tan inmadura del peli negro
-¿Por qué no podemos estar juntos? ¡Solo dimelo!- gritó el mayor asustando a Taehyung
-¿quieres saber por qué?- Taehyung alzo la voz mientras se levantaba poniéndose a la defensiva
-si, si quiero saber- preguntó el peli negro con desesperación...
-porque no puedo confiar en ti- Taehyung con ello dio por finalizada aquella estúpida discusión y huyo de aquel sitio, lo único que quería era estar lo mas lejos posible de Jungkook
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