Backstage (Soukoku)

7. Coincidencias

Atsushi observaba con molestia des de su escritorio a cierto castaño que se había apoderado de su cama y se estaba comiendo sus patatas fritas. Sin avisar, Dazai se había presentado en su apartamento, alegando que era una urgencia, para luego ponerse a vaguear con el móvil durante horas; y en realidad, eso realmente no le molestaba tanto, no, el problema era que el de ojos marrones no paraba de hablar. Hablar. A cada segundo.

- Pfft, que pregunta más tonta, que dónde estudió ese chibi? Pues por supuesto que es la c, habría que ser estúpido para no acertarla.

El albino se tuvo que armar de paciencia otra vez para no lanzarle uno de sus libros, ya era suficientemente difícil estudiar fisiologia de por sí, solo faltaba Dazai distrayendole cada diez segundos.

El de ojos marrones había decidido realizar ese famoso test sobre Nakahara Chuuya para ganar el sorteo y pasar el día con él, en su apartamento, al parecer necesitaba su compañía para "darle suerte".

Por centésima vez, respiró profundamente y le respondió con la voz más calmada posible.

- Dazai-san, por favor, los examenes empiezan en una semana, podría volver a su apartamento? Necesito concentrarme.

- Atsushi-kun te estoy haciendo un favor, deberías suspender y cambiar de carrera, a quién se le ocurre estudiar veterinaria? Que se curen solos los perros si son tan geniales!

- Me gusta mi carrera, y además, yo me quiero especializar en exóticos y-

Atsushi fue interrumpido por una exclamación de sorpresa de Dazai, pero como ya había soltado unas cuantas en lo que llevaba de tarde, el albino ni se giró a ver que le pasaba.

- ¿Ya está? ¿Este era el gran evento? ¡¿10 preguntas estúpidas?!

Dazai soltó un suspiro y se enderezó para quedar sentado en la cama mientras un esperanzado albino se giró a mirarlo con ojos brillantes.

- ¿Eso significa que se va?

Por desgracia, la ilusión se le fue tan pronto como vino.

- No, necesito asegurarme que voy a ver a ese enano, y tú eres indispensable en mi plan Atsushi-kun~

Atsushi ya no pudo más y apoyó su frente contra la mesa viendo que definitivamente el castaño iba a pasarse todo el día junto a él y no iba a poder evitarlo.

- Dazai-san, no habrá alguna otra forma de ver a Nakahara-san? Por lo que ha dicho, aunque acierte todas las respuestas, si más gente también lo consigue, cosa que es muy probable, va a elegirse al ganador por sorteo, y puede no tocarle a usted.

- Genial Atsushi, no se me había ocurrido! ¿Qué quieres que haga? ¿Le llamo por teléfono y le invito a un café? - antes de que el más joven pudiese responder, Dazai se quedó en completo silencio como si hubiese tenido una revelación. - ...crees que el muy estúpido se habrá cambiado el número?

A eso Atsushi sí que levantó la cabeza con interés y se giró para mirar a Dazai sin dar crédito de sus palabras.

- ¡¿Ha tenido su número todos este tiempo?!

- Bueno, sí, tengo el antiguo de cuando íbamos a preparatoria! - Dazai levantó las manos en señal de paz por que la expresión de Atsushi ahora mismo daba miedo y pensaba que en nada iba a saltarle encima y matarle. - ¡Pero no me acordaba! Nunca he tenido especial interés en contactarle, y es muy probable que se haya cambiado el número, sino cualquiera podría contactarlo.

Atsushi se levantó de la silla y se fue a sentar al lado de Dazai, quien había sacado su móvil y estaba observando un contacto titulado como "Babosa". El albino prefirió no comentar nada al respecto y solo pudo preguntarse cómo lo tendría agregado a él.