Limerence

𝐏𝐫𝐢𝐨𝐫𝐢𝐝𝐚𝐝𝐞𝐬.

𝐂𝐚𝐩𝐢𝐭𝐮𝐥𝐨: 𝐗

— ARRIBA SHREK DURMIENTE!!! — gritan.

Poco a poco me voy a despertando. Veo a los chicos con globos, un pastel que alparecer esta quemado y cajas. Miro a mi mesita de noche y ya son las diez y treinta «carajo la alarma no sonó»

— ¿Qué pasa? — pregunto con la voz ronca.

Pedro se ríe y dice:

— Es tu cumpleaños ¿acaso lo olvidaste? — contesta burlón.

Veo que fecha es y es verdad, hoy es mi cumpleaños. En que momento pasaron tantos meses en tan poco tiempo.

Reparo en que todos están sudados, seguramente habrán ido a entrenar. El único que no esta es Alex. 

— Abre primero mi regalo. — dice Jacob saltando a mi cama y Pedro le responde con un golpe en la nuca.

— No, primero el mío. — le dice Pedro.

— Dejen de joder que va a abrir el mío. — dice esta vez Anthony.

Yo río, nunca me había saludado por mi cumpleaños asique no se me parecía importante. Jamás me habían dado un regalo.

— Ya, cierren la boca. — habla Felipe entrando a mi habitación con una caja bastante grande en sus manos. — que primero va a abrir el mío. — se sienta en mi cama corriendo a los chicos. Ellos se mueven y lo miran mal, pero no dicen nada.

Sonrío y acepto la caja que me entrega. Es marrón y tiene uno que otro agujero. Felipe me mira con una gran sonrisa que son contadas las veces que lo hace.

Al abrir esa gran caja, sale un cachorro marrón con una mancha blanca en el pecho con carita arrugada y muy gordito.

— Es macho, es un American bully XL — Dice Felipe después de un rato. — Ahora está chiquito pero va a crecer y mucho. — Dice algo... ¿nervioso? — ¿te gusta? 

Lo abrazo, no puedo de otra manera demostrarle cuanto me encanta este cachorro. Básicamente le salto encima pero a él parece no molestarle.

— Gracias, muchas gracias enserio. Me encanta pero ¿Por qué tiene las orejitas cortadas? —pregunto detallando al cachorro.

— realmente no lo compré, lo rescate de una familia que hacia pelea de perros. Este muchachito de aquí iba a ser el próximo. —cuenta mientras acaricia al sin nombre de cuatro patas.

— Bueno ya basta de historias tristes que voy a llorar y no quiero, ahora va el mío 

Se acerca Anthony y veo lo que es; son tres libros negros, una lamparita con luz Violeta y una lapicera que parece no escribir bien.

— La otra vez te encontré escribiendo y bueno pensé que esto te gustaría, estos cuadernos son negros porque cuando escribís con esta lapicera no se puede ver, osea es invisible, solo se ve con la luz ultravioleta.

Me quedo maravillada, es de lo mejor estos cuadernos. Lo abrazo, Este día no podría ser mejor.

Siguiente se acerca Jacob.