No podemos perderte ~ Crepúsculo~

~Capitulo 1~

¬ Narra Melissa

- hola?... Mamá estas en casa-

como nadie contesto, me fui directo a mi cuarto. acababa de llegar de la escuela y lo único que quería era acostarme y cerrar mis ojos un rato, luego de un minutos con mis ojos cerrados me quedo dormida

un fuerte ruido en la entrada de mi casa me hace despertar, miro por mi ventana y ya es de noche, me levante de la cama y me dirijo a la puerta de mi cuarto que estaba cerrada, pero en eso escucho murmullos con risillas

-ssssh silesio, de seguro mi hija esta durmiendo-

- Si quieres también podemos invitarla, soy lo suficiente hombre para complacer a dos mujeres-

- No digas tontearías, ella solo es una nena-

en eso escucho como mi madre ingresa a su cuarto, el cual queda al lado de la mía, con un poco de asco, vuelvo a dirigirme a mi cama para dormir de nuevo

me acuesto en mi cama y cierro mis ojos. en eso empiezo a escuchar sonido de la cama de mi madre golpear con la pared, escucho sus gemodos y las asquerosidades que le decía el hombre

simplemente agarro mi celular y los auriculares y comienzo a escuchar música e intento dormirme

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Me desperté y miro la hora en mi celular, ya eran las 7 de la mañana y me tenia que arreglar para ir a la escuela

me levanto de la cama con pereza, sin antes quedarme unos minutos sentada en la esquina de mi cama observando con mucha atención mi zapatos, salgo de mi cuarto y entro al baño para hacer mis necesidades y la rutina higiénicas, cuando estoy por salir del baño me choco con un hombre desnudo completamente, a de medir 1,80cm, panzón y con barba

- Hola hermosa, no sabia que estabas en el baño- me dijo con una sonrisa arrogante y parecía no darle vergüenza su desnudez  

- Hola-

fue lo único que dije para salir del baño empujándolo un poco para que me diera espacio, me dirigí a la cocina para prepararme algo de comer. cuando estaba terminando de comer escucho pasos detrás mío

- No sabia que Margaret tenia una hija tan linda. ¿Cómo te llamas linda?-

- No tengo deseos de hablar con usted, déjeme en paz señor-

- No seas maleducada niña- dijo con una vos un poco molesta- oooh vamos, ¿tendré que rogarte para que me digas tu nombre?- su tono de vos cambio a uno "juguetón"-

yo ya no respondí, simplemente me levante, acomode las cosas que había utilizado para comer y me dirigí a mi cuarto para cambiarme y poder ir a la escuela

por suerte el viejo asqueroso no me siguió, pero de todas formas cerré la puerta de mi cuarto con llave, me cambie y me coloque mi mochila, salí de mi casa sin complicaciones y me fui a la escuela.

así es mi vida desde que mis padres se separaron, todos los días mi madre llega con un hombre nuevo a la casa donde tienen sexo, se drogan o incluso se pelean físicamente.

yo ya estoy acostumbrada a este tipo de situaciones, desde que tengo 11 años aprendí a cerrar mi puerta con seguro antes de irme a dormir, aunque por obvias razones, algunas veces se me olvida.

y mi padre... El desapareció de nuestras vidas y solo le envía dinero a mi madre para que me mantenga. no se nada de su vida. los primeros años. debo de confesar que me sentí muy mal, pero a quien no le hace mal enterarse a los 11 años que tu padre solo te ve como una obligación que debe mantener, y que solo esperaba la primera oportunidad para deshacerse de mi.