"No te enamores"

"Perdóname una vez más..."

Saint despertó a ojo ciego, una punzada en su estómago le hizo acostarse de nuevo haciendo una mueca de dolor muy desagrada.

Miro a su alrededor y al primero que vio fue a mew, eso le tranquilizó un poco, se trató de levantar nuevamente tratando de aguantar y ocultar su dolor.

– Mew...– sonrió llamando la atención del contrario quien inmediatamente se limito a darle una sonrisa tierna y sincera

– Despertaste – dijo y beso su frente

– ¿En dónde estoy? – miraba todo a su alrededor pero no lograba reconocer nada lamentablemente

– Estás en mi habitación...– sonrió

– ¿Que no la otra era tu habitación? ¿O tienes dos? – pregunto un poco confundido ya que en su vida había visto está habitación, ya que si ni siquiera sabía que existía por qué mew nunca le dijo

– ¡Ja! No, esa solo era para ponerte a prueba, necesitaba tomar confianza sobre ti ya que este cuarto tiene muchas cosas preciadas y...mis últimas ex parejas han robado o han traído amantes a la cama...– río por lo cometido haciendo reír al otro también

– Escucha mew yo...–

– Shhh, no digas nada, todo es culpa mía, yo te provoqué y ocasione todo esto, por no querer confiar en ti...– lo abrazo fuertemente

Saint se sintió aliviado por eso.

– Pero...¿Por qué lo hiciste? – Saint bajo su mirada en cuanto mew se alejo – Saint ¿Por qué lo hiciste? ¿Por qué te cortaste las venas? Por qué...¿Te incitaste a morir? – su voz sonaba preocupada, y creyendo que el otro no respondería solo se levantó y colo sus manos en su cintura

– Bien, entonces no me digas nada...– se molestó un poco por qué saint parecía no tenerle la suficiente confianza como para decirle que l estaba sucediendo

Y justo cuando se iba a ir, Saint le hablo.

– Yo...no quería hacerlo, ese chico se me pegó, yo no quería...– mew se acercó rápidamente, escuchando atentamente cada palabra que salía de la pequeña boca rosada de Saint – El...se me comenzó a pegar como chicle, traté de distraerlo e ignorarlo, incluso me porte cortante con el...– su voz sonaba desanimada

– Ah, pero nada te funcionó...– claramente sonaba molesto pero trataba de calmarse y ocultarlo para no alterar y asustar más Saint, ya que este no hablaría y en cambio comenzaría a llorar otra vez

Y el odia a los niños que lloran seguido, y es exasperante.

Saint solo se limitó a asentir con la mirada baja pero fija en sus dedos.

– Y luego...trate de conversar con la vendedora pero simplemente no me hizo mucha plática, trate de ignorar el hecho de que el me seguía acosando, y luego...– tomó aire para decir lo siguiente – él...metió su dedo en mi ano...– trató de no llorar pero era imposible, tan solo de acordarse de esa sensación siendo tocado y al público no era muy agradable que digamos, es más, no era para nada agradable el hecho de que lo hayan tocado

– ¡¿Que!? – gritó furioso

Ese chico lo iba a escuchar, lo iba a escuchar

Y cuando estaba a punto de salir rumbo a la tienda para ver si lo volvía a encontrar o por lo menos localizar para evitarle la entrada a todas las tiendas de esa ciudad o por lo menos que lo metieran a la cárcel, Saint lo detuvo.

– Antes de que te vayas...tengo una pregunta para ti – sonó un poco indiferente con él. Mew soltó la manija en ese momento y lo volteo a ver – ¿Por qué no me dijiste que eras una celebridad? – lo miro fríamente haciendo que un escalofrío recorriera la columna vertebral de mew

– Yo...–

– Contéstame... – hablo serio

– Hablaré contigo más tarde, tengo unas cosas que hacer...– dijo y cerró la puerta

Ese chico lo iba a escuchar si o si.

Para demostrarle que nadie se mete con su chico ni mucho menos andarle toqueteando el culo a su rey.