Aragón (Bl)

Capítulo 37: ¿Quieres vivir conmigo...?

#Modificado

No pude evitar bajar la cabeza, sabía que me estaba evitando, pero confirmar mis sospechas es sin duda doloroso y hasta preocupante. De cierta forma, sólo por esa razón acepté, necesitaba un cambio rápido, así que los reyes me fueron sugiriendo ideas para mejorar mi relación, incluso me dijeron que nos tomáramos unas pequeñas vacaciones.

Sé que lo decían por cortesía, fingiendo que era una sugerencia, sin embargo, sabía que era más bien una orden, ya que habían hecho todos los cambios para que mi reemplazo tomara mi lugar.

Como estaba libre luego de aquella conversación, decidí tomar algunas de mis cosas y otras pocas de Blue para llevarlas al palacio, quería pasar la noche en aquel lugar para confirmar o rechazar la propuesta de vivir en ese sitio.

Una vez que entré por la parcela del palacio, me sentí incómodo tras ver la inmensidad del lugar, todo era perfecto, hasta el jardín tenía dimensiones específicas para la altura del pasto y arbustos con formas de animales que había en la entrada.

Cuando entré, me di cuenta de que tenía varios muebles cubiertos por sábanas blancas que evitaban la acumulación de polvo en los muebles, por otro lado, era un sitio iluminado que deseaba investigar con Blue, por ello, dejé nuestras cosas en la entrada antes de dirigirme al portal que me llevaría de una forma más rápida al reinado vecino.

Llegar al castillo no me tomó demasiado, además como era de esperarse, los sirvientes me trataban con amabilidad y pronto me dirigieron al paradero de Blue, quien estaba hablando con unos sujetos. Supuse que aún no terminaba su trabajo, por ende, esperé pacientemente alrededor de dos horas.

Cuando lo vi caminando sin compañía por los pasillos, no dudé en acercarme y así visualicé su sorprendido rostro al verme. Esté planeaba regresar para entregarle la información reunida a los reyes, pero le sugerí desviarnos un instante del camino que Blue debía hacer.

Quería mostrarle el palacio, así podría aceptar o rechazar el regalo de los reyes cuando él fuera a entregar la información. Por supuesto que me sentía nervioso, Blue no entendía qué estábamos haciendo allí, incluso se mostraba desconfiado frente a la idea de entrar y pasearnos por el lugar.

—¿Es un nuevo sitio de descanso para los reyes? —me preguntó mirando a su alrededor, sin tocar nada para así no romper algo que podría ser costoso— es enorme.

—Gracias, ¿y el palacio también? —dije haciéndolo sonreír.

—Hablaba del palacio— me aseguraba con una sonrisa preciosa.

—¿Qué te parece? —pregunté tomándolo de la mano mientras entrelazaba nuestros dedos— es bonito.

—Sí, es precioso— me respondió mirando el largo pasillo de las habitaciones— ¿sería correcto mirar los dormitorios? —me preguntó acercándose a una puerta, la cual abrí para ver qué tan grande era.

El sitio estaba amueblado, faltaban algunas cosas, sin embargo, podríamos pasar la noche en este sitio sin problema, el único inconveniente es que no encontrábamos la cocina, así que fuimos abriendo todas las puertas que veíamos. De cierta forma era ideal para revisar el lugar, pero preocupante tras no encontrar lo que estábamos buscando.

—¿No hay un mapa sobre las instalaciones? —me preguntó apoyándose en la pared ya cansado de buscar, sin embargo, no era una pared, más bien era una puerta secreta que se abrió de forma improvista.

Por suerte Blue reaccionó adecuadamente o se habría caído por las escaleras que llevaban a la cocina y a las habitaciones de los sirvientes que antiguamente había en esta casa. Eran aproximadamente 10 habitaciones con un pequeño letrero en cada puerta, de esta forma, sabíamos para quién estaba destinada cada habitación.

Los antiguos dueños tenían ama de llaves y mayordomo, ellos naturalmente tenían una habitación para ellos solos, mientras que el resto de sirvientes compartían las habitaciones siguientes. Todas las habitaciones tenían dos camas, incluso había 4 que tenían 3, por ende, supusimos que eran para sirvientes y ayudantes de cocinas.

—¿Te imaginas viviendo aquí? —le pregunté mientras Blue observaba un cuarto que tenía varios estantes para almacenar los alimentos.

—No puedo permitirme un sitio como este— me aseguraba.

—Es un regalo de los reyes— informé por fin, viendo como rápidamente se acercaba para mirarme a los ojos.

—No bromees— me pidió.

—No es una broma, yo estaba buscando un sitio para mudarnos, pero cometí el error de decírselo a Danny, quien eligió junto a Logan este lugar para nosotros, ellos dijeron que así podríamos pasar más tiempo juntos— le fui contando mientras me miraba sorprendido— incluso mencionaron un ascenso como generales.

—¿¡Hablas en serio?!—preguntó con sorpresa mientras me tomaba de las mejillas— por favor, no bromees con eso...—me pedía nervioso.

—No bromeo— le aseguré sintiéndome embobado por su sonrisa.

Blue se puso muy feliz cuando le informé sobre la noticia de ser generales, sabía que la idea le gustaría, por ello, me sentía emocionado por verlo tan feliz. Me encanta ver su rostro alegre, él se ve tan lindo cuando sonríe...

—Blue— lo nombré deslizando mis manos por sus mejillas—¿Qué dices? ¿Quieres vivir conmigo...? —pregunté sintiéndome muy nervioso— si es demasiado pronto, está bien, puedo esperar, no quiero ahuyentarte.

—No...—susurró bajando la cabeza con tal de ocultar su sonrojo— está bien, y-yo sí quiero...—añadió tímidamente.

No me pude resistir, deseaba atrapar sus labios apasionadamente, así de paso disfrutaba de nuestro momento a solas para recompensar el tiempo que hemos pasado sin besarnos.

Besarlo me resulta algo mágico, me encanta poder sentir sus labios entrelazándose con los míos, incluso me gusta cómo se aferra a mi cuerpo para pedirme de una forma indirecta que nos abracemos. Blue me encanta, me gustaría pasar el resto de mi vida con él, incluso quiero hacerlo feliz y tener ese tipo de relación romántica que tanto envidio.

Sé que las vacaciones nos vendrán muy bien, como estamos sólo los dos, podremos pasar tiempo juntos, incluso podemos limpiar el lugar para acomodarnos apropiadamente.

Por supuesto que, luego de cortar el beso, sabíamos que debíamos dirigirnos al castillo. Ya estando allí, los reyes nos invitaron a cenar para hablar sobre el palacio, hasta deseaban enviar a sirvientes para ayudarnos con la mudanza.

Se sentía raro recibir tanta ayuda, ellos contrataron a nuevos sirvientes sólo para que fuéramos atendidos, de hecho, nos dijeron que llegarían mañana al mediodía, por ende, no podía evitar sentirme nervioso por todo este cambio que estamos teniendo, aunque Blue estaba muy emocionado por la idea, así que no podía rechazar la ayuda de los reyes.