"Déjame ver si entendí; ¿Tu ex novio reunió a sus tres ex novios para invitarlos como "damas de honor" en su boda?". Recopiló Hirunkit.
Win ni siquiera podía creerlo él mismo. Al principio creía que Gun les estaba jugando una mala broma. Es decir, ¿Quién invita a su ex novio a su boda? Pero al parecer todo era real.
"Mandalo a la mierda". Sentenció Hirunkit luego de meditarlo.
"¡No puedo!". Win esbozó un puchero lleno de frustración.
"¿Por qué?".
"Porque es Gun".
Hirunkit lo observó con cara de incredulidad.
"Siempre supe que eras idiota pero esto solo me lo confirma". Resopló. "¡Amiga, date cuenta!".
"No lo mal entiendas, no es que lo haga porque sigo sintiendo algo por él, es solo que, fue más mi amigo que mi novio. De hecho lo que teníamos ni siquiera podía ser considerado un noviazgo. Éramos mas bien amigos con beneficios aunque los únicos beneficios que tenía eran que podía tomarlo de la mano y besarlo un poco".
Su relación con Gun no había sido mala pese a todo. Habían compartido buenos momentos. Compartían pasatiempos, se habían contado algunos secretos, se querían pero jamás había llegado a ser el tipo de relación que Win habría esperado. Quizás esa fue la razón por la que no le sorprendió mucho cuando Gun lo engañó. Él nunca fue un buen novio para empezar.
"¿Y dónde mierda piensa hacer la boda? Aquí en Tailandia no se pueden casar dos personas del mismo sexo". Hirunkit interrumpió sus pensamientos.
"Estados Unidos". Respondió Win, recordando que debía buscar su pasaporte si es que quería cumplirle a Gun.
Hirunkit se tiró sobre el sofá de la casa de Win como si estuviera en su propia casa y lo pensó en silencio. Win era pésimo para decir 'no' por lo que no le sorprendía que hubiera aceptado de inmediato. Algunas veces le gustaría darle un buen golpe al idiota.
"No soy mucho de tirarle hate a las personas pero, ese ex novio tuyo suena como un...".
"¡No quiero escucharlo!". Win se cubrió los oídos y empezó a tararear una canción.
Hirunkit se incorporó para arrojarle una almohada del sofá hacia la cabeza.
"Te fue infiel, te dejó sin importarle como te sintieras, te ignoró mientras era feliz con el otro tipo. Ahora te busca y en lugar de pedirte una disculpa te pide que seas su 'dama de honor', ¿Me estás jodiendo? ¿Cómo no puedes odiarlo?".
"Yo tuve la culpa también".
"¡Sigues defendiendolo! Mierda, ¿Por qué a todos los idiotas de buen corazón les pasan las peores cosas?".
Win no pudo responder cuando su celular empezó a sonar a todo volumen, una llamada de número desconocido. Usualmente no respondía ese tipo de llamadas pero ¿Qué más daba? Pensó y deslizó el pulgar sobre la pantalla táctil para responder.
"¿Diga?". Habló con tono formal.
"Metawin ¿Dónde estás?". La voz de Bright sonó al otro lado de la línea.
"¡Hola, Win! Soy yo, Tay, el amor de tu... ¡AUCH! Joder, Bright no me empujes".
Win frunció el ceño y despegó un poco el teléfono de su rostro para comprobar que la llamada seguía cuando lo único que escuchó fueron golpes y sonidos irreconciliables antes de quedar en silencio. Volvió a colocar la bocina del celular en su oído y esperó hasta que la voz ronca de Bright sonó de nuevo.
"Metawin, necesitamos hablar contigo".
"... Claro". Asintió lentamente.
"No por teléfono, en persona".
"¡En un motel, de preferencia!". Chilló la voz de Tay al fondo.
Hubo una serie de golpes y gritos antes de que Bright volviera a la línea, carraspeando un poco cuando agregó;
"¿Estás libre ahora?".
"... Si". Win desvío la mirada hacia Hirunkit quien lo observaba con los ojos entre cerrados desde el sofá.
"Bien, envíame tu dirección a éste número, pasamos por ti".
"¡No!". Win reaccionó a tiempo, lo último que quería era que Hirunkit se encontrara con aquellos dos, seguro terminaría hablando de más. "Quiero decir, yo puedo ir a donde ustedes me digan". Completó.
Hubo silencio. Estaba casi seguro que escuchaba murmullos, la voz de Tay se escuchaba distante cuando finalmente hubo respuesta.
"¿Conocer el Dark & Wild?". Preguntó Bright con calma.
"Si...".
"A ver, échate la de Hip Hop Love". Dijo Tay, gritando para ser escuchado.
Win empezaba a sentirse nervioso. Hubo más sonidos extraños y gritos de Tay quien pedía a Bright que se detuviera de hacer... ¿Qué cosa? Probablemente golpearlo.
"Sé refieren al bar gay ¿No?". Intervino cuando observó como Hirunkit se incorporaba para acercarse a él.
"Si, ese". Dijo Bright quin sonaba agotado de tener que forcejear con Tay, al parecer.
Win se tensó cuando Hirunkit llegó hasta donde se encontraba y se puso aún peor cuando su amigo se inclinó para poder hablar cerca del móvil y decir;
"¿Con quién hablas, amor?". Usando un tono tan cariñosamente empalagoso como pudo.
Win escuchó el sonido de algo cayendo y quebrándose al otro lado de la línea.
"¡Te lo dije!". Chilló Tay, cuya voz sonaba más que nada eufórica. "¡No había manera en el infierno de que no tuviera... AH, mierdaaagggh!".
Win estaba seguro de haber escuchado agua o algún tipo de líquido asfixiado a Tay.
Hirunkit intentó arrebatarle el celular de la mano a Win, sin embargo este era mucho más fuerte y ágil a pesar de ser unos centímetros más bajo así que esquivó el intento y se alejó.
"¿Quienes eran? ¿Tu ex novio y su nueva adquisición?". Preguntó cruzándose de brazos.
Win no respondió mientras buscaba su billetera y su chaqueta para luego correr hacia la puerta.
"Volveré luego, no olvides cerrar bien cuando te vayas". Pidió casi cuando iba saliendo.
"¡No vayas a hacer otra cosa estúpida!". Alcanzó a escuchar la voz de Hirunkit.
Win ignoró aquello. No es como si Bright y Tay le fueran a pedir que hiciera alguna locura absurda.
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