Despertar

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- Narrador Omnisciente

20 de Enero
Azabu, Tokio, Japón.
Un vecindario tranquilo lleno de complejos residenciales donde cierta azabache vive, es un departamento precioso digno de ser uno de los suburbios más caros de Tokio.

Son las 6:10 de la mañana, el cielo pinta  color celeste claro prometiendo ser un día cálido. Son las 6:15 de la mañana y en cierto departamento una alarma no a dejado de sonar desde hace más de 10 minutos, la razón Mikasa Azumabito tenia un sueño demasiado profundo a causa de su desvelo la noche anterior, todo debiéndose al impecable proyecto que venía realizando, ya que al fin después de mucho tiempo tenia la oportunidad de presentar su potencial ante Kiyomi si todo salía bien al fin podría considerarse inversionista activa y comenzar a laborar en la sede ubicada en Londres.
Un pequeño paso en su búsqueda a la libertad ya que al estar en las instalaciones tendría acceso a muchísima información y de esa manera poco a poco podría ir escalando hasta llegar a la alta jerarquía.
Actualmente Mikasa es la encargada del clan Azumabito siendo la representante de Kiyomi y siendo la encargada de las de relaciones exteriores de la empresa es decir viajar y llevar a cabo firmas de consulados que beneficien a la  asociación, por lo tanto siempre viajaba aunque la mayor parte del tiempo a países cercanos a Japón.
Kiyomi siempre se mantenía en Europa, cada cierto tiempo para ser específicos cada 20 de cada mes viaja a Tokio, para atender asuntos del clan, por tal razón hoy se presentaba tan esperada oportunidad la cual estaba agendada desde hace 6 meses y la que perdería si Mikasa no despertaba.

              -RIIIIN-RIIIIIN-RIIIIN-

El teléfono que anteriormente sonaba como alarma ahora sonaba como tono de llamaba entrante, el ruido fue tan constante y mucho más ruidoso que logró el cometido y Mikasa despertó, una torpe mano salió del inmenso conjunto de cobijas, tomando el teléfono de la mesita de noche y al fin contestando con muchísimo desgano.

-Hola habla Mikasa.

-Por Dios!! te llame mas de 7 veces y hasta ahora contestas-hablo la persona del otro lado del teléfono.

-Perdona dormi hasta tarde- respondio aún con los ojos cerrados- ¿Ocurre algo?

-No nada que te importe, solo que Kiyomi llega a Japón hoy, ya sabes lo normal - respondieron con cierta irritación.

-¿Kiyomi?-Abrió los ojos lentamente cuando escucho su nombre y después exclamó- ¡Oh, por Dios! Me quedé dormida - Vio la hora en su celular
- son las 6:54 perdí demasiado tiempo, te llamo después.- colgó muy alterada.

Tirando todo a su alrededor logró salir de la cama e ir directamente a la ducha, quitándose la pijama e ingresando a la regadera.

-Una cosa, solo una cosa tenias que hacer y te quedas dormida- se decía a si misma mientras se enjuaga el cuerpo.
-Levy va a matarme si se entera.

7:30 A.M

Afortunadamente ya estaba cerca de las instalaciones, el día estaba muy cálido de no ser así el tráfico estaría insoportable, Mikasa se dio un pequeño retoque de maquillaje en el transcurso del camino ocultando las leves marcas debajo de sus ojos, portando un conjunto blanco y unas zapatillas del mismo tono estaba lista para ver a Kiyomi.
Antes de llegar tomó su teléfono y llamo al numero que aparecia en el primer lugar, suena dos veces y contestan.

-Hola, Annie.

-Mika al fin, espero ya estés en tu respectivo clan-Dijo la rubia.

-Estoy a unos minutos de llegar jeje-río nerviosa.

-Estas nerviosa, no es verdad?

-Claro que estoy nerviosa, tengo la incertidumbre de saber que dirá, tú sabes que si dice que no todo se volverá mas difícil.

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