Sagrado Café.

30 24 46
                                    

No sé si les pasa que hay días muy tranquilos, hasta aburridos me atrevería decir,  y luego hay otros que parecen demasiado intensos en que todo se te junta, pues parece que este era uno  de esos días.

Llegando a la recepción casi sin aliento porque aunque no corrí tuve que apretar el paso, pues no me gusta llegar tarde, Sophia que tiene la costumbre de quedarse en mi puesto mientras no estoy me dice que Benjamín pidió verme en su oficina en cuanto llegara.

Miro mi reloj y compruebo que tarde no llegué, y me preocupa que será, inevitablemente comienzo a pensar que es algo malo, que no van a necesitarme más o no sé, de camino agarro un vaso de agua, el cual intento tomar antes de llegar a la puerta, pero me distraigo  mirando el cristal de la oficina de al frente que hace función de espejo,e intento acomodarme el cabello con la mano que me queda libre pensando que el se encontraba adentro, pero lo cierto es que venía detrás de mi.

—¿Necesitas ayuda?—sostiene al mismo tiempo la puerta y con sus manos me indica que entre y tome asiento.

En esos instantes me preparaba psicológicamente a que me dijera que no continuaría trabajando, prefiero siempre pensar lo peor, así y cuando mis sospechas se cumplen siento que duele menos, no sé, es una forma de protegerme a mi misma.

También pienso que si fuera el caso, no lo veré más, y que nunca tuve la oportunidad de decirle lo que sentía o de al menos conocerlo un poquito mejor. Debía haber inventado las oportunidades, o espera, eso sería algo muy parecido al acoso.

Quizás lo que si debí haber hecho era no ser tan tajante, me explico, muchas veces yo terminaba las conversaciones antes de que él lo hiciera, solo porque pensaba que el tema estaba por acabar y que era preferible hacerlo así.

¿Orgullo? Tal vez. O simplemente demasiadas inseguridades juntas.

El respira profundo y aunque intenta disimularlo no puede, esconde algo de tensión.

—Te pedí que vinieras  para conversar sobre tu contrato...

Vuelve a hacer otra pausa y respira profundo, aumentando mi incertidumbre.

...—Pero primero quisiera hablarte de otro tema.

Automáticamente pensé que se trataba de la famosa técnica del sandwich, esa en la que para dar una crítica al igual que el sandwich tiene dos rebanadas de pan se comenzaría con un elogio,la crítica y nuevamente algo positivo.

En este caso sería por ejemplo:

  "durante este tiempo has mostrado ser eficiente(elogio), sin embargo necesitamos a alguien que sea más experimentado en el mundo editorial(crítica), pero te haremos una buena recomendación y encontrarás un buen trabajo(algo positivo o eso creo)".

Si mis pensamientos fueran carros creo que irían a 80 km por hora.

—Ashley sin más rodeos,te lo diré ...hace algún tiempo me he dado cuenta que tú........

Oh no,por el amor de Dios, ¿tan evidente es que yo siento algo por él?, pensaba que era buena actriz y que lo disimulaba bastante bien.

...— Hace tiempo que tú, que yo en realidad...

Mis manos comienzan a sudar y creo que las piernas me están temblando

— Ashley que estoy sintiendo cosas por ti, cosas muy bonitas que no sentía hace mucho, estar cerca de ti me hace bien, me hace reír de una manera diferente, lo extraño es que lo sentí desde  la primera vez te vi, no te voy a decir que fue amor a primera vista, me refiero a que sentí una conexión, no sé explicarme, luego irte conociendo, ver tu forma de ver la vida, de la pasión con que haces todo, solo ha aumentado mi aprecio por ti. Si no te lo he dicho antes es porque te respeto.

Sus pensamientos me bombardean y no sé que hacer, ni mucho menos decir. Ni en mil años me imaginaba que me diría esas cosas.

Me levanto y actuo por instinto,salgo de la oficina y me dirijo al baño de mujeres, lavo mis manos y me enjuago la cara, siento que estoy sudando frío, y no me he percatado que el ha ido detrás de mí.

Entró al baño sin importarle que era el de damas, pero no había nadie, me toma de las manos y me dice:

— Discúlpame si tú no sientes lo mismo, olvida todo lo que te dije, no te preocupes esto no tiene que afectar el trabajo...

— No...

— ¿No sientes lo mismo? Tranquila, no pasa nada—me interrumpe.

— No, quiero decir, sí, me pasa lo mismo, osea algo bien parecido, pero nunca me hubiera armado de valor para decirte...

— ¿Lo juras? —sonríe mientras sostiene con sus dos manos mi cara, cual mariposa que va a salir volando.

— ¡Sííí! Digo aliviada como si me hubiera quitado un peso de encima. El peso de admirarlo en silencio.

En ese momento, y así tan cerca de mí, sentía que el corazón se me saldría del pecho, por primera vez pude sentir el olor de su piel y la suavidad de sus manos, en esos minutos no me importó que alguien pudiera entrar quería disfrutarlo al máximo.

Mentiría si dijera que nunca imaginé un primer beso con él, solo que nunca pensé que fuera a ser en el baño. De hecho no lo fue. Nuestros labios estaban tan cerca, pero no quise parecer desesperada y de seguro el no quiso que yo pensara que se propasaba.

Me abraza tan fuerte que creo perder el aire, me suelta y me dice que debemos volver a trabajar, que   está pendiente la conversación del contrato pero que no me preocupe que todo está en orden.

Ya casi cuando estaba en la puerta me dice:

— ¿Te gustaría que nos tomáramos un café hoy? ,como Dios manda—sonríe.

Sé a que se refiere, el café de aquí es más bien claro y nos lo tomamos siempre corriendo.

— Me encantaría.

— Perfecto, nos encontramos a las 5:00 en el Sagrado Café.

— Allí estaré-confirmo.

💖💖💖💖💖💖💖💖💖💖💖💖

Parece que Ashley tendrá su primera cita, de seguro ella misma ni se lo cree aún, siempre lo he dicho si eres capaz de soñarlo eres capaz de vivirlo(obvio la frase no es mía).

Pero, ¿no tienen las empresas normalmente una clausula que impide relaciones amorosas en el mismo centro?

Normalmente es para evitar conflictos de intereses en función a los roles que desempeñan las personas involucradas en la relación.

Las razones para evitar estas relaciones son tres principalmente: la primera es que se oculten a la empresa los errores del otro; la segunda, para evitar que los problemas de pareja (discusiones, por ejemplo) se den al interior de la compañía y la tercera, para evitar que entre ellos se fragüen robos o actos indebidos.

También esta el nepotismo pero ese  abarca cualquier grado de parentezco.

Por el momento veamos que tal se dan las cosas y estoy segura que le darán la mejor solución.

Conociendo a Ashley.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora