𖤐⤸₊˚we are an angel and a demon • ⁱⁿᵉᶠᶠᵃᵇˡᵉ ᵒⁿᵉˢʰᵒᵗˢ

moustache

Segunda parte de "dressing room"

David Tennant & Michael Sheen

El castaño contuvo una carcajada que el pelirrojo pudo notar.

"Me veo ridículo, ¿no es así?"

"No..."

"Eso es un sí." giró los ojos volteando al espejo para verse el rostro.

"Solo me parece extraño ya que tú nunca, ya sabes, bueno, usas vello facial falso en la cara para un rol."

"Siento que en cualquier momento se me caerá."

"Tonterías cariño, tienes miedo de verte mal." ahora él se acercó al espejo para asegurarse que el maquillaje no se había arruinado para sus glamurosas escenas.

"¿Y como no preocuparme por eso si estoy trabajando al lado de mi novio?"

El castaño le alzó la mano para mostrar su precioso anillo de plata que él mismo le había obsequiado al preguntarle si quería unir su vida con la suya. "Prometido."

"Prometido." se corrigió colocándose al lado de Michael y sonrió viendo su perfil. "Te ves divino y yo parezco un político sacado de la basura."

El otro rió volteando a verlo con una resplandeciente sonrisa de esas que le caracterizaban y le alegraban las mañanas. No compartieron palabras, si no más bien un dulce beso deseándole suerte al otro en su papel asignado.
Aunque el pelirrojo paseó las manos por debajo de la ropa del más bajo recorriendo la caliente piel en un intento de dejar marcados sus dedos.

El rizado se separó riendo penosamente al saber de inmediato las intenciones de su pareja. "David... ahora no, no es lugar ni hora adecuad-" le calló con un beso más descuidado que el anterior provocando que el contrario cediera ante el tacto sintiendo como era cargado por la cintura para hacer que se siente en el tocador.

"Estamos solos y todavía falta para que empecemos a grabar."

"Vas a arruinar mi maquillaje."

"Yo lo arreglo." le quitó la ropa de la parte de arriba presurosamente para succionarle parte del cuello y dejarle preciosas marcas en la piel mientras posaba sus manos en sus muslos por mientras el castaño se dejaba llevar jadeando de a ratos.

Pasaron rato cuando estuvieron concientes de que se les haría tarde para ir con el resto del cast, así que se pusieron rápidamente la ropa de vuelta, ordenando su cabello y demás accesorios.
No queda de más decir que el bigote de David se había caído en quien-sabe-dónde y parecía que a Michael le había puesto otro labial de lo rojo e hinchados que sus labios estaban al igual que las marcas del cuello que agradecía que su traje cubría.

El de ojos multicolor vió reprochante a su pareja y este sonrió nervioso.

"Creo que exageré."

"¿¡Eso crees!? Si vas a ponerte así, se más precavido, Tennant." tomó las cosas que necesitaba y salió del vestidor en busca de algún maquillista que le ayudara a volver a verse como antes.

El día de grabación aún no terminaba, pero se mantenía entretenido viendo como es que su maravillosa pareja se movía tan naturalmente al hacer de Miles, lo cual le ponía una sonrisa en la cara la cual se hacía más grande cuando notaba que le veía de reojo.
Su dicha era más cuando los productores aceptaron que estuviera por ahí aunque su presencia no era requerida. Todas las personas en el set sabían de su relación y de la futura boda con Michael al igual que otros amigos junto con familiares -quien estuvo más feliz, cabe decir, por la noticia fue Lily ya que adoraba terriblemente al más alto-.

Llevaban unas semanas comprometidos y cada vez se le hacía más ilusión la idea de tenerlo. Lo adoraba y todos podían notarlo, como es que creaba su propia burbuja al momento de presenciar a su prometido en escena. Y muchos sabían que lo mismo pasaba con Sheen, ya que por su parte analizaba cada gesticulación que el pelirrojo hacía fascinado de que, esa persona decidió estar con él.

Aunque era más notorio quien se desconcentraba más fácil por la cantidad de veces que tenían que repetir escena por un distraído David.

Cuando no se necesitaba ni de uno ni de otro, ellos solamente se sentaban lado a lado tomándose tímidamente de las manos como si apenas empezaran a darse cuenta que se gustan y que no son una relación de unos cuantos años a punto de casarse, lo cual, a cualquiera le resultaba adorable.

La rutina no tardó en llegar sin molestarles, ya que, a final de cuentas, podían convivir en el mismo entorno.
Era fácil, desayunar, hablar con Lily quien estaba con sus abuelos, irse a la localidad de la grabación, vestirse y tratar que David no provoque otro lindo accidente que después se tuviera que tapar con maquillaje en el cuello del más bajo.

Fueron unas cuantas semanas hasta que la película por fin se había terminado de grabar por completo.

Estaban en el vestidor para poder regresar a casa -o bueno, al hotel donde se estaban hospedando-, el castaño estaba retirándose el maquillaje de la parte de los ojos y el pelirrojo le veía mientras se quitaba la camisa.

"Sé que me estás viendo, ¿qué pasa?"

"Esta será la última vez que estaremos juntos, ya sabes, trabajando." se escuchaba melancólico por lo cual lo vió e ignoró que el bigote se le despegaba del rostro lentamente.

"Oh, David, querido, pero vivimos en la misma casa." rió levemente para ir a abrazarle para que el más alto acunara su cara en el hombro contrario.

"Pero, ¿y si tengo que salir o...? ¿O tú? ¿O ambos a distinto sitio? ¡No nos veremos en quién sabe cuanto!"

"¿Qué no recuerdas cómo era nuestra dinámica antes? No es como si siempre estuviéramos juntos grabando."

"Y eso me gustaría, para verte siempre aunque a veces me hagas trabarme en mis líneas."

"Eso no es mi culpa. Igualmente, si volviéramos a estar en un mismo proyecto siempre estuvieras con manos escurridizas." al contrario se le sonrojaron las mejillas mientras veía a otro lado.

"No sé de que hablas."

"Eres un caso perdido, Tennant." tomó sus mejillas después de eso y unió sus labios mientras que este acomodaba el bigote de vuelta a su lugar.

Sentía que era de esos preciosos momentos que se quedaban tatuados a tu memoria por muchísimo tiempo no importa si era simple o extraño, era algo que añoraba, era una placentera experiencia.

El beso acabó pero los recuerdos de unas cuantas semanas venían a su mente dándole una desordenada pero añorada película.