A la maestra de ballet de Hyesoo no se le ocurrió mejor idea para que sus estudiantes se relajasen y practicasen que dándoles dos semanas de vacaciones. Hyesoo solo quería descansar y practicar, pero terminó siendo arrastrada por su madre a la famos...
Ten decidió que Hyesoo podría usar los camerinos del estudio para bañarse y ponerse un cambio de ropa que Sana se ofreció a prestarle. Escondió unas mentas entre las prendas por si Hyesoo sentía que las necesitaba.
En cuestión de minutos, mientras el resto retomaba su práctica, apareció la chica con sus cabellos húmedos atados en una cola alta, su flequillo recogido en un gancho y la vestimenta adecuada. Esos zapatos parecían estar hechos a su medida.
—Ven, querida —la llamó Chittaphon—. Estamos repasando las posiciones.
Hyesoo pasó saliva. Las posiciones eran lo más básico y ella era malísima en ello. Intentó seguir al resto; pudo notar la mirada de Christopher por momentos que intentaba ayudarla. Fue cuestión de segundos antes de que mister Lumiere se colocara frente a ella. Con un palo delgado, elevó su mentón y codos.
—Mirada hacia arriba y brazos seguros, eso debes tenerlo en cuenta —pasó a empujar su pie—. Demasiado al costado. No estás en equilibrio.
Los demás estudiantes la miraban y murmuraban. Ten se puso en pie y también se acercó. Hyesoo esperaba no haberlo decepcionado demasiado.
—Haré las posiciones paso a paso. Imítame lentamente.
Chittaphon fue muy paciente. Mientras el resto de sus compañeros avanzaban la coreografía general con Lumiere, él se dedicó por completo a la técnica de ella.
—Mejor, pero hay que seguir practicando, ¿ok? —Hyesoo asintió agotada. La humedad en su cuerpo ya no se debía al agua, sino al sudor—. Christopher te ayudará. Nos vemos en la práctica de mañana, no te rindas.
Asintió, no muy convencida pero algo más positiva con respecto a su leve mejora. Esperaba poder descansar unos segundos, pero al ver a Chris frente a ella supo que eso no sería posible.
—Estaba pensando —comenzó él, tendiéndole una botella de agua que ella agradeció—, ¿te parece si estiramos un poco? Tus músculos deben estar tensiónanos porque a diferencia del resto, tú aún no estiras. ¿O sí?
Hyesoo abrió la boca, sintiéndose sonrojar. Si había algo más básico que las posiciones, eran los calentamientos previos.
Chan pareció notar su nerviosismo, por lo que soltó una leve risa y negó.
—Hey, no te preocupes. A todos nos pasa una vez —se colocó en un área más libre de estudiantes y la de cabellos caoba le siguió—. Hagamos esto y volveremos a las posiciones antes de enseñarte una de las coreografías del recital. ¿Te parece?
—Claro, yo... muchas gracias, en serio.
El chico sonrió, mostrando por milésima vez en el día sus encantadores hoyuelos.
Toda la mañana se la pasaron haciendo lo mencionado. Hyesoo se sentía muy agradecida con Christopher, pues sin dudas comenzó a sentir ciertas actividades más sencillas de hacer.
—¡Eso es todo por ahora! —exclamó Lumiere—. Vayan a almorzar algo ligero y vuelvan aquí a las cuatro.
Hyesoo cayó al suelo agotada. Lo complicado sería quitarse los zapatos.
—Wow, realmente eso es difícil para ti —escuchó la risa ligera de Chan y bufó—. Déjame ayudarte.
Vio al chico desatar las cuerdas con facilidad para pasar a sonreírle.
—Chan, mi madre horneó postres y pan, quiere invitarte a tomar lonche —Sana se acercó a ambos. Al ver a Hyesoo aún presente, saludó nuevamente—. También puedes venir, Hyesoo. Me gustaría conocerte más.
Algo dudosa, miró a Chris. Este saltó poniéndose de pie y envolvió un brazo alrededor de Sana.
—Nunca me perdería la comida de tu mamá. Vienes, ¿Hyesoo?
La mencionada terminó por asentir. De todas formas, era la única forma que podría comer algo. No había cenado la noche anterior y menos desayunado. No creía poder aguantar más con el estómago vacío.
—Me encantaría —dijo con una sonrisa apenada.
—¡Genial!
La comida con la familia Minatozaki fue muy cálida. Le preguntaron por su interés en el ballet y fue sincera al respecto. En ningún momento la hicieron sentir incómoda y lo agradeció. Llegó a conocer más a Sana y comprendía que ella y Chris fueran tan cercanos, prácticamente ambos eran personas con las que era fácil llevar una conversación.
—¡Eres un amor! —sintió a Sana abrazarla a la hora de regresar al estudio —. Doy por hecho que eres familia de Chittaphon, son un encanto —palmeó su cabeza y Hyesoo se sintió como una mascota, pero le causo gracia—. Puedes considerarme tu amiga. Al igual que Chris, te ayudaré en todo lo que pueda.
—Muchas gracias, Sana, en serio.
—No hay de qué —la abrazó una última vez—. ¡Ahora vayamos antes de llegar tarde!
El resto de la práctica, pese a ser agotadora, también fue divertida. No solo había logrado un avance, de la misma forma obtuvo una nueva amiga.
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capítulo aburrido pero no menos importante. lamento la demora, aquí dejo dos capítulos como disculpa :(
