NARRA IRENE:
Todavía no terminaba de asimilar lo que había ocurrido, me había besado con él bailando una de mis canciones favoritas... Al acabar la canción, me abracé a él como si llevara años sin verlo, sin duda era él, lo había encontrado.
Irene: Gracias por esto, enserio. Es un sueño echo realidad.
Daniel: Amore mío, gracias a ti por haber aparecido en mi vida.
Pasamos un rato de tonterías en el sofá cuando empezó a hacerse tarde. Pero recuerdo que mi madre iba a estar unos días ausente en casa, y me cuestiono si debería de preguntarle si se quiere quedar.
Irene: Oye, ¿tienes que hacer algo hoy?.
Daniel: No, si ya es de noche. ¿Porqué?.
Irene: Esto... Mi madre pasará unos días fuera de casa, era por si te querías quedar a dormir hoy aquí.
Daniel: Si quieres, por mi genial, pero antes tendría que parar un segundo en mi casa a coger unas cosas.
Irene: Por supuesto, no te preocupes.
Al terminar de decir esto, él sale de la casa y me deja a mi sola. Aprovecho para seguir poniendo algunas de mis canciones favoritas. Empiezo a buscar en una lista y pongo la de Beautiful that way versionada por Il Volo, y como una niña pequeña, cierro los ojos y me pongo a bailar al son de la música alrededor del salón, sintiéndome libre, sin ataduras ni sufrimientos, estos momentos siempre han sido muy especiales para mí, la música es una forma que tengo de salirme de la realidad de esta vida de mierda y sumergirme en las letras de las canciones, a cada cuál de ellas, aún más hermosas.
Ahora, mientras bailaba, me acuerdo de que aún no tengo pareja para el baile de graduación, creo que luego debería de preguntárselo a Daniel, aunque es cierto que dudo mucho que quiera acompañarme.
Al cabo de unos minutos llaman al timbre y voy a abrir, es Daniel, entra y deja su mochila en el sillón del salón.
Daniel: Bueno que, ¿te apetece hacer algo?.
Irene: Podemos ver una película si quieres, tengo Netflix.
Daniel: Genial
Irene: Antes tengo que preguntarte algo un poco comprometedor, que entiendo que no quieras.
Daniel: Aún no me lo has dicho y ya dices que no querré.
Irene: En una semana me graduó.
Daniel: ¡Pero eso es genial Irene!.
Irene: Todos van a ir al baile y si voy, que aún no lo he decidido, me gustaría que me acompañases, si quieres claro.
Daniel: Será un honor acompañarte.
Irene: ¿En serio?
Daniel: Claro pequeña -afirmó acercándose a mi para poder acariciarme la mejilla con su cálida mano, lo que me hace cerrar los ojos con ternura.-.
Irene: Te quiero -dije susurrando.-.
Daniel: Yo también te quiero.
Y entonces, desde hace mucho tiempo, dije un te quiero sincero, de esos que puedes guardar en una caja de los recuerdos.
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¿Porqué cambiaste?
RomanceMe salvaste de las manos de la peor compañía que podía tener a mi lado, me enseñaste lo que era sentirse querida de verdad por alguien y conseguiste abrir las puertas de mi corazón hacia ti. Pero volvió tu ex novia y te alejaste de una manera muy do...