Te Conocí En La Azotea (En Remodelación)

Capitulo 7

La buena noticia, Es que mi papá había aceptado por fin que pudiera cuidar al perrito.

La mala, Es que estaba una semana más castigada, ¡Ya estaba castigada por dos meses! ¿¡En serio otra semana?!

Otra mucho mejor, Es que dijo que si iba a poder subir a la azotea.

Aunque iba a tener que soportar al chico...

Aunque.. Bueno, Brock y Ale decían que me había salvado de una caída posiblemente mortal, ¿Estaría siendo demasiado grosera con el?

Ni siquiera sabía su nombre y ya lo estaba tratando mal..

—¡Sarah!

Me desperté de mis pensamientos cuándo mi papá me habló, Lo voltee a ver desde la mesa de el comedor donde estaba haciendo mi tarea. Estaba al lado de la puerta.

Un momento..

Oh no.

Me estaba viendo con una expresión tanto como enojada como cansada.

—¿S-Si?—le respondí con una sonrisa inocente

El me miró un segundo más antes de abrir la puerta sin siquiera mirar afuera.

Y ahí estaba Ale, Con una mochila, El pelo peinado en un moño informal, y una sudadera gigante. Sonrió ampliamente viéndome desde la puerta y saludo energéticamente a mi papá con la mano.

Y pude notar que seguía con el maquillaje cargado en su ojo..

—¡Hola señor Ramírez!

Mi papá hizo su sonrisa de comercial y la volteó a ver.

—Ale —le dijo entredientes—Sarah está castigada, No puede sali...

—Lo se —Lo interrumpió Ale- Pero la maestra nos dejó un trabajo en parejas, es sobre historia, ya traigo las cosas en la mochila. —dijo como si hubiera practicado eso por más de 2 horas.

—¡Es sobre el holocausto! —Agregue sin pensar

En ese momento tanto Ale como mi papá me voltearon a ver con la misma expresión, Gritándome con la mirada "¿Es enserio?"

—¿Holocausto? Que no eso lo vieron hace... —Intento decir mi papa.

—¡Si! El holocausto, Está vez es un trabajo de como sería nuestra versión de el diario de Ana Frank, Y sobre la estructura de... Los campos de concentramiento. —Dijo Ale ayudándome a arreglar lo que acababa de decir.

Mi papa la volteo a ver, estaba apunto de decir algo cuando Ale ya había pasado a la casa como si viviera ahí y fue hacía donde yo estaba.

—Bien, Cierra la tarea de el profesor cabello —Era calvo. —y subamos a la azotea.

Me le quedé mirando unos segundos sin entender y luego ella cerró de golpe mi libreta jalandome del brazo llevándome a la puerta para salir al patio y de ahí a la azotea.

—¿No sería mejor que trabajarán acá abaj..? —Intento decir nuevamente mi papá.

—¡No tenemos hambre gracias! —Dijo Ale y cerró la puerta mientras subía antes que yo.