Capitulo 4

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Y ahí estaba, Viendo el rostro furioso de mi padre gritándome cosas que no lograba entender gracias a qué hablaba demasiado rápido.

Lo más que logré entender fue cuando me agarro del brazo y me llevo hacía mi habitación.

—¡Te dije que no podias Salir!

—Pero prácticamente no salí de la casa— le respondí con una sonrisa nerviosa

No lo hubiera hecho, Mi padre me dió una mirada de decepción y cerro mi puerta.

Que no me gritara se sentía mucho peor, y más si me miraba de esa forma. me acosté en mi cama y suspire.

—Si se enojó . . . — murmuré para mí misma y me quedé viendo el techo

Casi me caigo de la cama cuando mi padre volvió a abrir la puerta y me enseñó mi libro.

—Volví a subir, el vecino nuevo dijo que se lo habías prestado y no te lo pudo devolver cuando te llame— dijo fríamente y lo dejo en el escritorio cerrando la puerta

Me levanté de mi cama y agarre el libro, Supongo que cuando el chico me empujo deje el libro de nuevo en el piso.

Observé mi separa páginas, yo misma lo había pintado con acuarelas, pero un lado estaba en blanco. Bueno, ya no. Había un mensaje con letra bastante mala, parecía que lo había escrito con su mano débil.

—«Rescate tu libro, De nuevo»— Murmuré leyendo el mensaje

Voltee los ojos, agarré mi libró y me volví a acostar en mi cama. Me puse a leer el libro. Horas más tarde ya era de noche, Mi casa no tenía ningún reloj en la pared así que solo podía guiarme por la luz tal vez las 8 o 9.

—¡Sarah! ¡Tu cena!

Deje mi libro por mi almohada, Ya habia leido 6 capitulos, considerando que cada capítulo tenía 15 páginas, Había leido mucho y mi ojos estaban secos.

Salí de mi cuarto y baje las escaleras, Fui hacía la cocina y me topé con mi padre que ya iba saliendo de la cocina para ir a su cuarto, me señaló un plato con una dona y un vaso de leche y me dió unas palmaditas en el hombro.

—Buenas noches.

Se fué y cerró la puerta de su cuarto, fuí hacia la barra de la cocina y tomé mi plató junto con mi vaso, Voltee a ver de reojo la sala, Tenía una televisión que tenía Netflix. Mi padre me prohibió salir y el teléfono, pero no me dijo nada de la tele, aunque la última vez que use esa lógica no me fué tan bien.

Me acerque a el cuarto de mi papá y toque la puerta, Se tardo unos segundos en abrir la puerta, ya estaba en su pijama de rayas azul y blancas.

—¿Que paso?— dijo con cara se cansancio

—¿Puedo cenar viendo la tele?— le pregunté con cara incrédula sosteniendo mi cena

El hizo una mueca y penso unos segundos, Increíblemente, asintió.

—Solo no le tengas alto, Y apenas termines de cenar te subes a tu cuarto, nada de terminar el capítulo. ¿Ok?

Asentí y el volvió a cerrar su puerta, Quise saltar de alegría, claramente, no lo hice.

Fui hacia la sala y prendí la televisión. Al terminar de cenar apague el capítulo que estaba viendo de Lucifer y me subí a mi cuarto Justo como me había dicho mi papá.

Apagué las luces y me acosté en mi cama viendo el techo. Me tarde mucho tiempo en dormirme ya que normalmente ponía algún sonido de fondo para poder dormír, Y está vez era imposible, así que lo más que pude hacer fue estar 2 horas con los ojos cerrados . . . Esperando.

—¡Sarah! ¡Sarah! ¡Sarah!—Gritaba mi papá mientras me sacudía el hombro.

Me desperté casi saltando de la cama. Mire a mi papá con confusión mientras intentaba mantenerme despierta y volver a mi realidad.

—¡Vas a llegar tarde! ¡Faltan 35 minutos para que empiecen tus clases! —hizo una pausa— ¡34!

Me levanté de golpe aturdiendome por completo y casi cayendome, hice mi mejor intento para mantenerme de pie mientras iba a mi armario y buscaba mi uniforme.

—¡Te dije que no te quedarás viendo otro episodio Sarah!—Dijo mi papá regañandome.

—Te prometo que me subí apenas acabe mi dona, pero normalmente pongo ruido para dormir.—Le respondí apresurada mientras buscaba mi bata de baño

El me dió una mirada dudosa, Posiblemente no me creía pero eso no importaba ahora, entre corriendo ala baño y me di una ducha rápida, No había prendido el boiler así que estaba fría el agua.

—¡Maldición!—murmuré para mí misma

Salí corriendo de la ducha secandome lo más que pude con la bata, Me puse el uniforme sin siquiera salir del baño y Luego me cepille lo mejor que pude, Aún chorreando agua por los mechones de mi cabello.

Salí corriendo de el baño y me puse rapido los zapatos, Busqué mi mochila que anoche no había sacado nada así que simplemente la tomé y baje las escaleras.

—19 minutos Sarah— dijo mi padre con una mirada fría y dejó un cereal en la barra

Calcule en mi cabeza, La escuela estaba a 15 minutos caminando, No me iba a dar tiempos para acabar ese cereal.

—¡Perdón papá!— Le dije disculpándome y agarre una manzana verde que había en el frutero.

La lavé rápidamente y me dirigí hacía la puerta de la casa, ví de reojo la cara preocupada de mi padre y salí.

Mientras cerraba la puerta me llamo la atención un señor de pelo castaño que estaba paseando a un Husky siberiano macho, Peludo, Muy peludo, pelaje blanco y negro y ojos azules claros.

—¿Usted es un nuevo vecino?— le pregunté apresurada

—Si, Vine con mi familia.

Observé al Husky, Por alguna razón me estaba viendo con un rostro enojado, Me ladro pero el señor lo calló de inmediato.

—¡Max! Perdón no suele ladrar.

Observé al perro, Aunque era muy peludo podía ver qué estaba bastante delgado, pobrecito. El Husky vio a su dueño con cara ofendida y luego volvio a verme a mi.

—Esta bien, Debe ser por el nuevo vecindario.

Le sonreí al señor y me fui corriendo a mi escuela mientras comia la manzana que había agarrado de la cocina.

Holaaaaa!!! Soy Sart, Espero les guste este nuevo capítulo, Estoy intentando hacer capítulos más cortos pero no lo logro! Les juro que en un momento tenia 604 palabras y de la nada ví que ya tenía 979!:'U pero en fin, Adiós! Sart fuera. <3

Te Conocí En La Azotea (En Remodelación)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora