✨O.S. 8✨

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Andrew temblaba de la cabeza a los pies. Sus dientes castañeteaban y estaba tratando de controlar el temblor que sacudía su cuerpo, pero eso solo lo empeoraba. Por supuesto, el día que decidió lavar la ropa se cortó la luz de los dormitorios por la tormenta de nieve. Se negó a pedir la sudadera de otra persona después de que Nicky se burlara de él por usar la de Neil una vez. Todos los Zorros estaban actualmente en el área común del dormitorio de los atletas jugando juegos de mesa y tratando de mantenerse calientes acurrucados juntos con mantas. Andrew no quería ser parte de los juegos y no se sentía cómodo con nadie, así que se sentó en la esquina del sofá a mirar y acunar la pequeña taza de chocolate caliente para calentarse, pero no ayudó. Neil definitivamente notó su temblor y siguió gesticulando sutilmente hacia su regazo o haciendo una demostración de lo cálido que estaba con su té, su gran sudadera con capucha y su cálida manta. Andrew finalmente se hartó lo suficiente como para arrojar un malvavisco a la cabeza de Neil para llamar su atención. Una vez que Neil asintió Andrew se acercó a él, pasando por encima de Nicky para llegar hasta él. Se dejó caer en su regazo y empujó su cabeza sobre el hoodie de Neil. Era una de las sudaderas con capucha de Matt, por lo que tenía suficiente espacio para sacar la suya y ver lo que estaba pasando. Neil se reajustó, se tapó con la manta y se acurrucó. Los Zorros fueron lo suficientemente inteligentes como para guardar silencio y mantener las miradas al mínimo, aunque sólo fuera para mirar a Neil cuando era su turno de jugar. Ahora que estaba caliente, Andrew estaba cada vez más cansado. Se movió para poder doblar sus piernas dentro de la sudadera y poner su nariz en el pulso de Neil. Neil se estremeció ante su fría nariz en el cuello y continuó en el juego.

Debió haberse quedado dormido porque Neil ahora lo estaba despertando con un codazo para que pudieran irse a la cama. La energía debe estar de vuelta porque la mayoría de los Zorros se habían ido a sus propias habitaciones, solo Kevin se quedó porque nadie quería llevarlo a su dormitorio. Andrew se agachó fuera del hoddie y se dirigió a su dom. Neil lo siguió, se puso ropa de dormir y se acurrucó junto a él. Andrew se acurrucó más cerca de su pecho diciendo que solo tenía frío y que Neil era un horno viviente. Neil solo sonrió y le dio un beso en la frente susurrándole buenas noches y acercándolo. Se durmió calentito y se preguntó por qué eligió a este idiota para invertir su vida.

Yes or No? - Andreil One ShotsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora