Capitulo 3

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-Te digo que no la encuentro-repitió por cuarta vez Camila, revolviendo su mochila.

Había pasado un mes, fue muy largo y repleto de trabajos. Verónica se sintió agotada, también gastaba sus energías fastidiando a Lucy Vives y su pequeña pandilla. Al menos sabía que la altota se llamaba Dina, o algo así, de la ojiverde mas o menos.

Estaban en clase de arte y fotografía, Camila decía no encontrar su diario en ninguna parte. Vero sabia lo importante que era para ella esa libreta azul, allí estaban todos los secretos y pensamientos de su mejor amiga.

-Intenta recordar ...- comenzó a decirle Vero, pero su mejor amiga alterada era imposible.

-¿Recordar? ¡Llevo toda la bendita hora intentando recordar, Verónica! -Exclamó con sus ojos chocolate enojados.

Uy, me ha llamado por el nombre, está muy cabreada. La latina lamentó, nunca era buena señal cuando Camila la llamaba por su nombre.

-Tal vez en el pasillo, frente al laboratorio de Biología-dijo recordando haber pasado por allí, en ese momento Camila tenía la libreta entre sus manos.

-¡Buena idea! -Dijo para después ir a donde el profesor.

Al rato vio a su mejor amiga escabulléndose por la salida y echando a correr en el pasillo, debería estar aterrada de que alguien pudiera leerlo. Incluso la misma


Verónica nunca había tenido el placer de contemplar así sea las primeras páginas, era algo que solo Camila podía leer.

Estaba concentrada en su lienzo, aunque a ella no le gustaba para nada pintar, no era tan mala. Bueno, como Camila no. Al lado de ella estaba el trabajo de la castaña y era, parecían más rayones y garabatos, un desastre artístico. Verónica prefería otro tipo de arte, un método en el que lograra plasmar una imagen durante décadas ya la perfección, no una pobre imitación de lo que era la pintura y el dibujo.

Lucy Vives y su amiga, Dina alta Jansen, ¿Era así, ¿verdad? (es Dinah Hansen, pero fue un intento al menos) Bueno, ellas estaban unos puestos más adelante pintando una cesta de frutas.

Verónica estaba frustrada, veía a la castaña, pero esta al parecer no tenía ni idea de la presencia de la latina en la clase. Debía hacer algo al respecto.

-¡Oye, Jansen! ¿Esa es tu cara? -gritó la latina señalando la pintura amorfa de la rubia.

Varios rieron un poco mientras la rubia refunfuñaba y le mostraba el dedo medio, en el momento en que el profesor volteó, Verónica se encendió. Tomaría venganza apenas saliera del salón, pero veía el lado positivo. Lucy ahora parecía ser completamente consciente de que Vero estaba tras ella, sus ojos se encontraron unos segundos antes de que Lucy apartara la vista rápidamente viendo su lienzo. Me tiene miedo, pues claro, le hago la vida imposible. Se felicitó internamente, era mejor que esa tonta niña le tuviera miedo a que fueran amigas. Después al escuchar la campana fue por el pasillo, frente a su casillero guardando con brusquedad sus cuadernos estaba Camila.

-Oye, ¿Que sucedió? - dijo divertida el ver la clara irritación de la castaña, apretaba los labios y sus mejillas encendidas de la ira lo rectificaban.

-Jauregui, la fenómeno, eso me pasa-cerró la puerta del casillero de un golpe.

Vero arqueó una ceja, nunca había visto a Camila tan enojada y menos por una persona sin importancia.

-¿La rarita, verdad? -Camila la fulminó con los ojos y ella alzó las manos riendo -. Venga, ¿Qué te hizo?

-Ella tenía mi diario, Vero-frotó su frente mientras cerraba los

Rivales (Vercy)Where stories live. Discover now