Después de aquel descubrimiento, el enamoramiento de Lucy por ella, la latina estuvo con la cabeza en las nubes. Fue caminando torpemente por el pasillo, quería encontrar a Camila, recordaba la situación en la que se encontraba su amiga antes de salir de la cafetería. Seguía recordando la mirada de Lucy, sus ojos no mentían, al preguntarle si la amaba, a Verónica, los ojos cafés no pudieron engañarla. Lucy Vives enamorada de ella. Una chica tierna e inocente enamorada de la perra y malvada porrista de la escuela. Casi podía creer que se encontraba en la serie de Glee.
(Faberry debió de haber sido real, no me importa nada)
-¿Verónica?-escuchó la pequeña vocecita de Ally.
Dio la vuelta con una sonrisa tonta en los labios, aunque al instante logró borrarla. Ella no tendría por qué estar feliz.
Lo de hace un rato con Lucy nunca ocurrió, no hay pruebas. Shhh.
-¡Hola, Ally! ¿Qué sucede, solecito? -dijo tiernamente apretando las mejillas de la rubia. Ella hizo un puchero y se alejó de la latina, cruzándose de brazos y fingiendo estar enojada.
-¿Qué te he dicho siempre? Verónica se quedó pensativa.
-¿Qué rece el credo dos veces al día?
-No-la rubia rodó los ojos. (Mentirosa)
-¿Qué...asista a misa los domingos?-volvió a probar encogiéndose de hombros .- El anterior lo olvidé.
Ally bufó fastidiada.
-¡Eso no es, Vero!-parecía estar a punto de darle una reprimenda pero se detuvo de golpe, abriendo los ojos -. Espera ¿Qué se te olvidó qué?
-¡Ally, concéntrate!-alzó los brazos queriendo salvarse el pellejo, seguramente si no la paraba Ally terminaría dándole una charla religiosa y por qué debía asistir a misa .- ¿Qué es lo que siempre me dices?
Ally lo dejó pasar, igual el fin de semana le haría ver la Pasión de Cristo con ella. Pobre Verónica.
(Nunca falten a misa, cosas malas suceden si lo hacen)
-Te he dicho miles de veces que no me llames solecito-hizo un mohín tan adorable que la latina quería tomarle una foto y vendérsela al Troy ese, seguro recibía muy buen dinero por ello.
-Aja, como digas-alzó las cejas juguetonas, después volteó a los lados -. Por cierto ¿Has visto a Mila? No la encuentro.
Ally negó suavemente con la cabeza, se mordió el labio un poco pensativa.
-¿Puedo preguntarte algo?-dijo un poco vacilante.
Verónica le miró desconfiada ¿La había visto con Lucy? De ser así tendría que eliminarla, sabía mucho. No quería testigos. Qué mal, tan bien que le caía Ally...
-Claro.
-¿No has notado rara a Camila?-soltó la pregunta.
Verónica sonrió, al parecer Ally viviría. Pero después pensó, Camila actuaba rara pero ahora que ella sabía la razón, la ojiverde, no lo encontraba extraño. Su amiga estaba en su mundo de amor, simplemente. No podía decírselo a Ally ¡Seguramente explotaría! Mejor cubrirla.
-No creo...¿Por qué?-habló lentamente, analizando la expresión de Ally.
-Mm, por nada. Solo que...no me gusta cómo la mira Jauregui, tal vez esté acosando a Camila o algo-parecía preocupada la pobre rubia.
