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Levante de una terrible pesadilla, eran las 5:29 a.m.
Me asuste tanto que me senté rápidamente haciendo un ruido que hizo que despertara a William.

—Amor, ¿te encuentras bien?

—Si... si

—¿Que sucedio? ¿Segura estas bien?

—Si... si Will... estoy bien, solo fue una... una pesadilla..

—Esta bien, no te preocupes, solo fue un sueño... ¿Quieres bajar por un vaso de agua?

—Si porfavor

Bajamos a la cocina.
Encendi las luces y me senté en el sofa mientras esperaba a William que traiga mi vaso con agua.

—Aqui tienes mi vida

—Gracias Will...

—Y bien, cuentame, ¿De que fue tu sueño?

—Se trataba de mi nosotros... éramos una pareja feliz y normal pero luego huvo una invasión de zombies y nosotros nos ocultamos en un búnker, luego tu saliste por comida y entraron zombies y... me mordieron... luego tu llegaste y te asecinaron en frente de mi...

—...Um eso es muy... peculiar...

Reimos juntos y luego William me abrazo para luego besarme.

—Solo son sueños, ¿Si? no le temas... además estoy aqui contigo, y mientras aqui este yo, nada nunca te va a pasar

—William... te amo, en verdad lo digo

—Te amo aun mas princesa

Volvimos a besarnos y luego subimos al cuarto y seguimos durmiendo hasta las 2:46 p.m.

—Papi! Mami! levántese! ya es de dia!

—Um max, cariño, todavía es muy temprano, acuestate a dormir un rato mas...

Dije marmurando ente ojos cerrados

—Pero mami ya es muy tarde

—Max, ¿que hora es?

—No se la hora papi

—Cierto... -mira la hora- uy si que es tarde... Meli, amor, ya son las 2 de la tarde

—Uy, ¡¿es tan tarde?!

—Si amor, levantate y prepara a Max mientras hago el almuerzo

—Si, voy, vamos Max

Lleve a Max al baño, lo deje en la bañera, mientras el jugaba con sus juguetitos en la bañera le fui a buscar su ropa.
Luego de que jugase un rato, lo bañe y lo cambie con unos vaqueros cafes, una camiseta blanca y una chaquetita negra, sus zapatos negros y un cinturón negro también.
Me duche y me cambie con unos pantalones negros, una camisa beige, unas botas del mismo tono que la camisa. Me peine, maquille y termine de alistarme.

Bajamos a la cocina y William ya habia hecho y servido el almuerzo.
Nos sentamos en la mesa y comimos pollo con arroz y una salsa de champiñones.
Luego de eso abrigamos a Max, nos abrigamos nosotros y salimos hacia los establos.

—Papi, ¿Puedo subirme a mi caballito?

—Por supuesto campeón, deja te ayudo

—William, cariño, ten cuidado, es muy pequeño

—Claro que tengo cuidado amor

En eso recibí una llamada, era un número privado

—¿Quién es amor?

—No lo se, dice número privado... ire a atender

Amor ObligadoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora